Sylvester Stallone no parece pensar en la retirada de la industria del cine a pesar de sus 77 años. Su físico siempre ha sido el protagonista en sus ficciones, y memorables son sus papeles como John Rambo y Rocky Balboa. Y es que para dichas sagas, el actor siempre se ha mantenido en forma, llegando a transformar radicalmente su cuerpo para dejarlo definido en la gran pantalla.
Sin embargo, prestar el físico a Hollywood no siempre ha sido una de las mejores opciones. Un claro ejemplo fue la dieta que siguió el estadounidense de cara a la tercera de las películas de Rocky, ‘Rocky III’. Una dieta que le llevó a tener un físico definido, sí, pero que también le llevó a sufrir incluso daños cerebrales.
Stallone quería reducir su grasa corporal al 2,8%, y para ello decidió someterse a una dieta estricta y peligrosa, tal y como él mismo confesó en una entrevista para el ‘Wall Street Journal’: “Solía beber unas 25 tazas de café al día cuando hacía ‘Rocky III’. Todo mi desayuno consistiría en dos galletas pequeñas de avena hechas con arroz integral y 10 tazas de café porque quería mantener mi grasa corporal en un 2,8%”.
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