El alcalde de Athens (Georgia. EEUU), Kelly Girtz, aclaró este miércoles que la ciudad no es un “santuario de migrantes”, tras las críticas generadas por el asesinato de una universitaria la semana pasada supuestamente a manos de un venezolano indocumentado recién llegado, un caso que ha llegado al Congreso de EE.UU. y la Casa Blanca.
La pequeña ciudad al noreste de Atlanta se ha visto conmocionada tras la muerte de Laken Hope Riley, de 22 años, mientras corría por el campus de la Universidad de Georgia el pasado 22 de febrero.
El venezolano José Antonio Ibarra, de 26 años, fue arrestado como sospechoso del asesinato de la joven estudiante de Enfermería, y su hermano, Diego Ibarra, de 29 años, también fue detenido por presentar una tarjeta de residente falsa (‘green card’) al ser cuestionado por la Policía en medio de la investigación.
Las protestas por la muerte de la estudiante llegaron este miércoles a la Alcaldía de Athens, donde Girtz daba una conferencia de prensa sobre nuevas medidas para incrementar la seguridad en la ciudad.
El alcalde, en el cargo desde 2019, fue interrumpido varias veces por un pequeño pero ruidoso grupo de manifestantes, especialmente cuando aclaró que la ciudad “no era un santuario” de inmigrantes.
“No ha habido ninguna legislación de este Gobierno (el de Girtz) que haya creado el estatus de ciudad santuario”, dijo el alcalde sobre una resolución de 2019 que dice que “todas las personas, incluidas aquellas sin documentación” deben sentirse seguras al interactuar con el gobierno local y las fuerzas del orden.
Los manifestantes le gritaron mentiroso.
El alcalde, que llegó a la Alcaldía con una plataforma independiente, se defendió explicando que la medida “dignificaba la humanidad de todos” y que las palabras “ciudad santuario” no aparecen en la resolución de 2019.
Las políticas de ciudades santuario, que en general restringen la colaboración entre las policías locales y el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE, en inglés), han estado en la mira en los últimos días tras el asesinato de la joven.
Este martes, el alcalde de Nueva York, el demócrata Eric Adams, solicitó cambios drásticos en la política ‘santuario’ de la ciudad para que se permita a la Policía colaborar con las autoridades de inmigración, tras varios incidentes que involucran a inmigrantes.
JUST IN: Mayor of Athens, Georgia Kelly Girtz says the death of Laken Riley is “not connected” to illegal immigration and points the finger at Trump for being ‘mean’ to illegals.
Your country is controlled by m*rons.
Riley was killed by an illegal immigrant but Girtz is… pic.twitter.com/IrZRvPEnLs
— Collin Rugg (@CollinRugg) February 28, 2024
La muerte de Riley ha agitado el debate migratorio a nivel nacional provocando que el gobernador de Georgia, el republicano Brian P. Kemp, y los republicanos de los comités judiciales del Congreso EE.UU. exigieran a la Casa Blanca informes sobre el estatus migratorio de Ibarra, y por qué había sido dejado en libertad.
Ibarra ingresó por la frontera con México en 2022 con su esposa e hijo como parte de la ola masiva de migrantes que han llegado al país solicitando asilo.
Girtz dijo este miércoles que buscará que la Junta de Comisionados del condado Athens-Clarke apruebe “nuevas inversiones” en seguridad pública.
Los nuevos fondos ayudarían a mejorar un centro de la policía que conecta las cámaras públicas de la ciudad y las privadas para “procesar los casos rápidamente”.
Las autoridades lograron identificar a Ibarra y su hermano en menos de 24 horas del asesinato.
EFE