Relator de la ONU: reconocimiento internacional a talibanes no puede llegar sin derechos humanos

Relator de la ONU: reconocimiento internacional a talibanes no puede llegar sin derechos humanos

Líderes talibanes asisten a una ceremonia en Kabul para conmemorar el décimo aniversario de la muerte del mulá Mohamad Omar, el fundador de la agrupación fundamentalista islámica. (AP Foto/Ebrahim Noroozi)

 

 

 





La normalización del régimen talibán en el escenario internacional “exigiría serias mejoras en los derechos humanos, incluidos los de mujeres y niñas”, aseguró este viernes el relator de la ONU para Afganistán, Richard Bennett, quien denunció el actual deterioro de las libertades en el país de Asia Central.

“Las mujeres y niñas afganas han sido borradas de la vida pública, y nuevas órdenes de vestimenta están causando su detención arbitraria”, indicó Bennett en rueda de prensa, un día después de presentar ante el Consejo de Derechos Humanos de Naciones Unidas un informe actualizado sobre la situación en Afganistán.

En él, el relator enumeró ejecuciones públicas, el uso del castigo corporal por parte de las autoridades, y denuncias de asesinatos extrajudiciales, desapariciones forzadas, tortura a opositores al régimen talibán y discriminación de comunidades enteras, como la de etnia hazara.

Los talibanes dijeron a las funcionarias públicas que enviaran los CV de sus familiares varones que pudieran postularse para sus puestos de trabajo.

 

Bennett mostró su profunda preocupación por el fin de la educación para niñas más allá del sexto grado (unos 11 o 12 años), o por el veto a que las mujeres trabajen en ONG y oficinas de Naciones Unidas en el país.

Permitir que estos abusos se acepten con una normalización de los talibanes en la arena internacional “enviaría un inquietante mensaje sobre el compromiso global con las mujeres”, advirtió el relator, quien se refirió repetidamente al régimen que gobierna Afganistán como “un apartheid de género”.

Bennett también recordó la progresiva reducción del espacio público que han provocado actos como la detenciones de activistas y periodistas, todo ello en un contexto de “extrema crisis humanitaria y económica”.

“Tras más de 45 años de conflicto y ocupación, Afganistán es una sociedad gravemente dañada que, por otro lado, muestra una extraordinaria resistencia”, aseguró el relator.

EFE