La Corte Penal Internacional (CPI) expidió órdenes de arresto contra dos uniformados rusos, a solicitud de la Fiscalía. Son sospechosos de presuntos crímenes de guerra y lesa humanidad durante la invasión a Ucrania.
La decisión alcanza al teniente general Sergei Ivanovich Kobylash y al almirante Viktor Nikolayevich Sokolov. Se les imputa responsabilidad en ataques a infraestructura civil y daños excesivos a población, entre octubre y marzo.
La corte consideró que dirigieron ataques con misiles contra subestaciones eléctricas de forma intencional, cuando no representaban un objetivo militar legítimo. Lo cual configuraría un acto colectivo contra civiles.
Al evaluar que existen motivos razonables para su presunta culpabilidad, tanto en la ejecución de dichos ataques como por no controlar adecuadamente a sus fuerzas, la CPI pidió su captura a nivel global.
Con esta medida inédita, el organismo judicial internacional refuerza su investigación sobre posibles crímenes cometidos durante el conflicto armado en suelo ucraniano.
Con información de EFE