Ucrania está esperando el desbloqueo de una importante asistencia militar por parte de Estados Unidos. Mientras se aprueba esta decisión, en Kiev cunde el desánimo ante la escasez creciente de armas y municiones propiciada por la falta de acuerdo en el Congreso en Washington. Por eso son tan importantes las decisiones aprobadas este martes por países de la Unión Europea. En concreto, el ministro de Defensa ucraniano, Rustem Umérov, quien participó en la reunión de aliados de Ucrania celebrada en la Base Aérea alemana de Ramstein, explicó que “los socios han anunciado paquetes de ayuda que incluyen municiones de artillería de 155, 152 y 105 mm”, dijo el ministro, que reconoció que las fuerzas ucranianas necesitan urgentemente más artillería.
Por La Razón
Umérov también explicó que Ucrania recibirá “más misiles” para sus sistemas de defensa aérea y se felicitó por la entrada de más países en la llamada coalición de los drones, que busca dotar a las fuerzas de Kiev de más recursos en este sentido. Además, el titular de Defensa ucraniano destacó los pasos que se están dando para que los aviones de combate F-16 occidentales lleguen a Ucrania cuanto antes.
Fuentes ucranianas aseguran que en la cita de Ramstein, en Alemania, se habló menos de vehículos blindados porque el énfasis principal se pone principalmente en las municiones, de las que depende la estabilidad de las líneas de defensa ucranianas.
El jefe del Ministerio de Defensa alemán, Boris Pistorius, anunció un paquete de ayuda para Ucrania por valor de hasta 500 millones de euros. El paquete de ayuda incluirá inmediatamente 10.000 municiones, que serán entregadas desde Alemania, 100 unidades de vehículos blindados y 100 unidades de equipamiento para automóviles. Y se comprarán otros 100.000 proyectiles de 155 mm a fabricantes ucranianos. Además, Berlín ha encargado 180.000 proyectiles de artillería en el marco de la iniciativa checa. Es decir, el paquete de ayuda de Alemania, tanto a corto como a largo plazo, es extremadamente poderoso y grande, dicen fuentes ucranianas.
Para leer la nota completa, aquí