Casi un año después de que el estado de Nueva York tomara medidas para facilitar que los solicitantes de asilo obtengan beneficios en efectivo de asistencia pública, alrededor de 7.400 hogares de migrantes y refugiados en la ciudad parecen estar beneficiándose de un programa llamado Safety Net Assistance.
Por The City
El último informe trimestral de la Administración de Recursos Humanos de la ciudad muestra que los refugiados y solicitantes de asilo representan el 4% de todos los casos de la ciudad en el programa, una proporción que creció considerablemente en 2022 a medida que los inmigrantes llegaron en masa a la ciudad de Nueva York.
Safety Net Assistance ayuda a los neoyorquinos necesitados que no son elegibles para Family Assistance, el programa de beneficios en efectivo financiado principalmente por el gobierno federal a través de subvenciones de Asistencia Temporal para Familias Necesitadas. Muchos no ciudadanos no son elegibles para recibir esos dólares federales.
La inscripción en Safety Net Assistance ha aumentado rápidamente desde la pandemia, a medida que aumentaron las dificultades económicas, llegando a unas 250.000 personas en 186.000 casos en febrero. Eso no incluye a otras 116,000 personas más que pasaron a Safety Net Assistance después de alcanzar un límite de cinco años en los beneficios federales.
La proporción de solicitantes de asilo y refugiados en el programa se ha cuadriplicado desde que los migrantes comenzaron a llegar en grandes cantidades a mediados de 2022, pasando del 1% según los informes de la HRA y alcanzando un máximo del 5% en el informe trimestral de enero de 2023.
Los solicitantes de asilo ya calificaban para los beneficios de Safety Net Assistance si habían presentado solicitudes de asilo y también habían obtenido autorización de trabajo del gobierno federal. Un cambio de política en mayo pasado permitió a los solicitantes de asilo calificar para beneficios en efectivo incluso si aún no habían obtenido autorización de trabajo, un proceso de solicitud que ni siquiera puede comenzar hasta después de seis meses en los EE. UU.
La medida del estado también permitió que las personas de Venezuela y otros países elegibles que habían solicitado el Estatus de Protección Temporal, así como aquellos que solicitaron la Acción Diferida para los Llegados en la Infancia, calificaran para los beneficios.
El New York Post informó por primera vez el mes pasado sobre el cambio de política, sin aclarar que los solicitantes de asilo ya habían sido elegibles, aunque bajo condiciones más estrictas.
El aumento en la proporción de beneficiarios de la Asistencia de la Red de Seguridad que son solicitantes de asilo o refugiados se produjo antes del cambio de política de mayo de 2023, según muestran las estadísticas de la HRA.
La expansión del estado de aquellos que son considerados PRUCOL (que residen permanentemente bajo el color de la ley) es importante, dijo a LA CIUDAD Jack Newton, director de las unidades de defensa LGBTQ y beneficios públicos de Servicios Legales de Nueva York. Sólo los no ciudadanos que sean considerados PRUCOL pueden ser elegibles para recibir Safety Net Assistance.
La ciudad de Nueva York había solicitado ese cambio, según Anthony Farmer, portavoz de la Oficina de Asistencia Temporal y para Discapacitados, para alinear la definición de PRUCOL utilizada para Safety Net Assistance con la definición de PRUCOL utilizada para Medicaid.
Newton dijo que tales inconsistencias sobre quién es PRUCOL entre los programas estatales podrían haber llevado a problemas legales para el estado debido al trato desigual.
“Hay muchas categorías que fueron barridas, y decir que su asilo realmente es faltar al blanco. Simplemente resulta ser un fútbol político en este momento particular”, dijo Newton sobre el cambio de reglas. “Abarcaron una variedad de categorías diferentes, muchas de las cuales, en mi opinión y en la de muchos otros, estaban listas para ser demandadas por no haber sido incluidas antes”.
Jean Carlos, un migrante venezolano que llegó a la ciudad hace aproximadamente un año con su familia, le dijo a LA CIUDAD que él y su esposa solicitaron recientemente beneficios en efectivo, luego de que un amigo mencionara que serían elegibles. Esperan recibir ayuda económica en los próximos días.
La familia, con un hijo pequeño y dos hijas, solicitó el Estatus de Protección Temporal en diciembre y se inscribió en atención médica hace dos meses.
Carlos describió su situación laboral como inestable, trabajando más algunas semanas que otras en empleos con salario mínimo. “Ayudará con la comida, con la ropa. Con ese dinero podremos hacer más”, dijo sobre la asistencia en efectivo.
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