Un nuevo implante cerebral presentado en China ha permitido que un mono controle un brazo robótico “solo con sus pensamientos” y logre agarrar fruta con él.
Esta tecnología de interfaz cerebro-computadora (BCI, por sus siglas en inglés) de alto rendimiento se basa en un chip cerebral central, llamado Neucyber, desarrollado de manera independiente por científicos chinos, informó en las últimas horas el diario local Global Times.
La compañía estadounidense Neuralink, propiedad del multimillonario Elon Musk, ya implantó el primer chip cerebral en un humano, aseguró el magnate el pasado enero.
El Neucyber, creado por la empresa Xinzhida Neurotechnology, se basa en tres componentes desarrollados en el país asiático: microelectrodos flexibles de alta capacidad, dos dispositivos de adquisición de señales neurales de alta velocidad y un algoritmo de decodificación neural generativo.
“La BCI implica capturar cambios sutiles en las señales eléctricas del cerebro, decodificar las intenciones cerebrales y lograr el control de ‘pensamientos’ sobre ‘acciones’, permitiendo el control de máquinas sin contacto físico”, explicó el experto del Instituto Chino de Investigación Cerebral Luo Minmin, citado por el rotativo.
Los electrodos implantables utilizan materiales flexibles, reduciendo en gran medida el daño al cerebro y asegurando una adquisición de señales estable a largo plazo.
Según Li, el electrodo flexible lleva implantado de forma estable en el cráneo del mono casi un año y aún puede recopilar señales de alta calidad.
El experto indicó que, en el futuro, estos avances podrían ofrecer nuevas esperanzas para que las personas paralizadas puedan tocar y agarrar cosas en el mundo físico. EFE