Las declaraciones de Daniel Sancho desde su detención hasta su testimonio en el juicio

Las declaraciones de Daniel Sancho desde su detención hasta su testimonio en el juicio

El joven español Daniel Sancho, quien se enfrenta desde el pasado 9 de abril a un juicio a puerta cerrada en Tailandia por el supuesto asesinato premeditado del cirujano colombiano Edwin Arrieta, testifica hoy ante el juez.

Antes de su declaración en el Tribunal Provincial de Samui (sur de Tailandia), determinante para el juicio, Sancho, de 29 años, se ha manifestado acerca de lo ocurrido en varias ocasiones, tanto ante la policía como el magistrado y en declaraciones a EFE.





Estas son algunas de las declaraciones más relevantes realizadas por el español, hijo y nieto de los actores Rodolfo Sancho y Sancho Gracia (conocido por sus apellidos), desde el supuesto crimen el pasado 2 de agosto en Phangan (cercana a Samui).

5/ 6 de agosto de 2023: La confesión policial

Daniel Sancho confesó el asesinato premeditado de Edwin Arrieta, a quien conocía desde el año anterior y con quien había quedado en Tailandia, en la comisaría de la isla de Phangan entre el 5 y el 6 de agosto, después de acudir allí la noche del 3 a denunciar la desaparición del colombiano.

En su confesión escrita, incluida en el informe policial, al que tuvo acceso EFE (de la que no ha trascendido si fue grabada por la policía), reconoce “todos los cargos voluntariamente”, y declara lo siguiente sobre el día de los hechos:

“Sobre las 4 – 4,30 pm (del 2 de agosto), mientras estoy sentado en la cama (de su habitación reservada en el hotel Bougain Villa de Phangan), Edwin se sitúa frente a mí, junto al cuarto de baño. Hablé a Edwin de poner fin a la relación, pero se negó y me pidió que me acostara con él. Me negué”.

“Me puse de pie y le propiné un fuerte puñetazo en su cara con mi mano izquierda, lo que hizo que se cayera. Su cabeza se golpeó fuertemente con el lavabo, de forma que sangró, pero aún estaba consciente. Entonces Edwin me mordió el brazo izquierdo, y yo luché, agarré a Edwin, le levanté y le lancé con fuerza contra el lavabo, hasta que perdió el conocimiento”.

“Me di cuenta de que salía sangre del baño, estaba en shock, y paré durante una hora hasta asegurarme de que Edwin estaba muerto. Después arrastré su cuerpo hasta la ducha, limpié la sangre y utilicé el cuchillo para cortar la ropa de Edwin, y, además del cuchillo, cogí la sierra y otras herramientas que había comprado para descuartizar el cuerpo”.

6 de agosto: “Era su rehén”

El 6 de agosto, cuando ya ha firmado la confesión ante los policías de Phangan y ha sido detenido formalmente, Sancho dice a EFE desde la misma comisaría:

“Soy culpable, pero yo era el rehén de Edwin. Me tenía como rehén. Era una jaula de cristal”.

“Él estaba obsesionado conmigo. Me engañó, me hizo creer que lo que quería era hacer negocios conmigo, meter dinero en la empresa de la que soy socio (…) Pero era todo mentira. Lo único que quería era a mí, que fuera su novio”, señaló.

Sancho, que llegó a la isla de Phangan el 1 de agosto, relató que el cirujano colombiano decidió unirse a su viaje: “Cada vez que intentaba alejarme de él, me amenazaba”, añadió.

16 de agosto: La Policía le interroga en prisión.

Días después de su ingreso en prisión provisional en Samui el 7 de agosto, la policía vuelve a interrogar a Sancho, esta vez en el penitenciario y frente a su entonces abogado, Anan Chuayprabat.

Durante ese interrogatorio, Sancho niega por primera vez el asesinato premeditado de Arrieta y el haber comprado los cuchillos con ese fin, según varias fuentes cercanas al caso, y de acuerdo con lo que el mismo Anan (conocido como Khun Anan) declaró cuando acudió a testificar por parte de la Fiscalía.

“La única pregunta que me han hecho es si durante el interrogatorio policial al que yo asistí, Daniel admitió que había cometido el asesinato. Mi respuesta ha sido que no, ya que él solo se refirió al desembramiento y no admitió haber cometido ningún asesinato u homicidio”, contó Anan al salir del tribunal.

13 de noviembre: No culpable ante el juez

En una vista de la fase preliminar, ante el mismo juez ahora encargado del juicio oral, cuya identidad es confidencial, Sancho se declara por primera vez frente al magistrado no culpable del asesinato premeditado, si bien acepta el cargo de descuartizar su cuerpo.

Sancho también niega haber hecho desaparecer el pasaporte del colombiano, el tercero de los de los tres cargos en su contra, y afirma que la muerte de Arrieta se debió a un accidente.

13 y 14 de marzo: “Me van a absolver”

En declaraciones a EFE durante dos visitas a la cárcel de Samui el 13 y 14 de marzo, afirma que está “convencido” de que le van a absolver del cargo de asesinato premeditado, que Tailandia castiga con hasta la pena de muerte, porque actuó en “defensa propia”.

“Fue una pelea que yo no empecé y que tuvo un desenlace fatal que yo nunca habría querido”, apuntó.

9 de abril: Comienza el juicio en Samui

Durante la primera vista Sancho escucha de nuevo los tres cargos que la Fiscalía presenta en su contra y vuelve a aceptar el de ocultación del cadáver. Sobre la destrucción de documentación ajena, admite haber hecho desaparecer el pasaporte de Arrieta pero rechaza el cargo alegando que no supuso un perjuicio para la víctima, como recoge la ley.

Se declara asimismo no culpable del único delito de extrema gravedad, el de asesinato premeditado.

“Fue una muerte accidental durante una pelea que yo no empecé. Le pedí muchas veces que se fuera”, dice al juez. EFE