Entre seis a ocho trancas diarias protagonizan los yukpas a la altura del km 56 en la Troncal 6 del estado Zulia. Con una actitud hostil, amenazante y desafiante piden dinero para dejar circular los vehículos por la vía, exigiendo el pago de un dólar o 40 bolívares en adelante. Los conductores se sienten amedrentados cuando algún miembro de esa etnia, golpea los vidrios de sus vehículos y muestran una piedra o un palo.
Lexzys Lugo / Corresponsalía lapatilla.com
Los habitantes de los municipios Rosario de Perijá y Machiques, así como quienes transitan a diario por esta vía, están hartos de la anarquía que reina en esa zona desde hace más de seis meses por el comportamiento agresivo de los indígenas.
Los yukpas arriban a 32 días apostados en las inmediaciones de un comando de la Guardia Nacional en el km 56. El grupo de indígenas asciende a 300 personas, quienes tienen carpas, motocicletas, vehículos, ropas y enseres en el lugar, donde además cocinan sus alimentos.
El pasado 30 de abril, la patilla.com recibió denuncias de choferes que presenciaron el cierre de la vía y lidiaron con seis trancas en menos de un kilómetro. Por eso hacen un llamado urgente a la gente para que voten el próximo 28 de julio, pues creen que solo un nuevo gobierno puede parar esta situación, que califican de “absurda”.
“Como es posible que un comando de la Guardia este allí, y los yukpas se pongan a cerrar la vía, pidan dinero, agredan ante la mirada complaciente de las autoridades. Aquí ya se perdió todo, hasta el respeto por las autoridades”, señaló.
En las redes sociales circuló un vídeo de una reunión de personalidades del Gobierno Nacional para tratar el tema de los yukpas. Allí una mujer se quejaba que bajo la excusa de la venta de artesanía, no pueden seguir protestando.
En el audio, la vocera detalló que más de un millón de artesanía el Ejecutivo Nacional le ha comprado a los indígenas, por lo que exhortó a parar el cierre indiscriminado e integrarse a sus actividades para generar sus recursos.
Pese a estas declaraciones, los yukpas continúan apostados en las inmediaciones de la GNB, persisten las trancas intermitentes y se han extendido hasta el km18.
Los representantes del Gobierno Nacional siguen sin pronunciarse ni tomar acciones que obliguen a los indígenas a frenar este cierre arbitrario de la vía, que en esta oportunidad llega a 32 días.