El alemán Thomas Tuchel, técnico del Bayern Múnich, no quiso centrarse en “el mito del Real Madrid” ni hablar de ello con sus jugadores, aunque aseguró que el conjunto blanco “tiene un 51% de posibilidades de ganar” por el hecho de jugar el partido de vuelta de las semifinales de la Liga de Campeones de fútbol en el Santiago Bernabéu.
“Hay que jugar el partido. Con los jugadores no hablamos del mito del Real Madrid, aunque sabemos que es uno de los estadios más difíciles donde ganar; pero no imposible. En la ida jugamos mejor y no ganamos. El Real Madrid tiene un 51% de ganar por jugar en casa”, dijo Tuchel en rueda de prensa.
¿Cómo voy a explicar yo el mito? Yo de pequeño ojeaba los libros sobre los éxitos del Real Madrid y siempre aparecía Emilio Butragueño; si me quedaba despierto a ver una final siempre salía Butragueño… y me viene a la memoria esa imagen. Es uno de los clubes más importantes del mundo y va a ser una semifinal magnífica. Es un regalo y una obligación. Estamos jugando una semifinal para llegar a la final”, añadió.
“Hemos tenido un día más de preparación que en el partido de ida. Hemos aprovechado ese tiempo con doble sesión de estrategia y preparando el partido contra el Real Madrid. Ahora acabamos de llegar y tenemos que disfrutarlo. Ahora cada uno tiene que hablar con su voz interior y ser consciente de lo que va a pasar. Cada uno tenía sus sueños con la pelota cuando era pequeño y ahora hemos llegado a este momento”, declaró Tuchel, que entró con una sonrisa a la sala de prensa y se mostró sentimental durante su comparecencia ante los medios.
El técnico del Bayern apuntó a la posesión de balón e intentar frenar a Toni Kroos como las claves de la eliminatoria.
“Va a haber diferentes fases en el partido. Ambos equipos tendrán que defender, aguantar y sufrir cuando el rival tenga el balón porque ambos equipos son capaces de aguantar el balón mucho tiempo. Nosotros vamos a intentar mantenerlo. Ambos somos muy buenos en transiciones rápidas y va a ser un partido muy complejo. Necesitaremos convicción para que todo sea posible”, señaló.
“No puede haber táctica en cuanto al resultado, porque traemos un empate de la ida. Quien gane va a ir a Wembley”, añadió Tuchel, en referencia al mítico estadio inglés que albergará la final del torneo.
“Toni Kroos es un jugador clave desde hace años. No tiene problemas en aguantar la presión y llevar la camiseta de este club a un alto nivel. Tiene una trayectoria impresionante con una forma de dominar el juego a su manera. Sabe aprovechar los espacios y tiene las riendas el juego para el Real Madrid. Quizá mañana le podemos hacer la vida un poco difícil a Toni, pero no sólo vamos a enfrentarnos a él”, apuntó.
El entrenador alemán también se refirió a cómo cree que se puede parar a Vinícius Junior, protagonista de la ida con un ‘doblete’.
“Es difícil pararle. Hay muchos equipos que lo han intentado y no siempre es posible. A veces hay que resistirse a la calidad de un jugador. Vinícius puede recibir la pelota en corto y en largo, regatear… ¿se puede hacer mejor que en el primer partido? Sí, y lo vamos a intentar. Pero hay que aceptar que no todo sea perfecto para nosotros mañana”, señaló.
Tuchel valoró su hasta cierto punto controvertida temporada en el Bayern Múnich. “Si hay que ganar una ‘Champions’ para reconocer el éxito no vamos a ser felices. Lo que cuenta es el resultado del club en Bundesliga y en Copa; y no conseguimos lo esperado. En la ‘Champions’ estamos a un paso de la final. Yo tengo una opinión, pero quizá la opinión pública tiene otra”, declaró.
Además, aunque ponderó el momento del fútbol alemán, no quiso pecar de eufórico. “Que Leverkusen, Dortmund y nosotros estemos en semifinales de Liga Europa y Liga de Campeones es un impulso para el fútbol alemán. Y un gran logro, sin duda. Pero todavía no hemos conseguido nada”, dijo.
Tuchel bromeó respecto a lo que le ha sorprendido del delantero internacional inglés Harry Kane -“Bebe mucho café al día”- y analizó la situación de Bryan Zaragoza en el Bayern Múnich, sin tener protagonismo tras llegar del Granada en el mercado invernal.
“Ha sido un paso muy grande para él. Con todo el respeto al equipo en el que jugaba. Peleé con mi director deportivo para que viniera, pero empezamos a tener malos resultados, no habla inglés, alemán… Todos los fichajes llevan su tiempo. No ha pasado nada. Está con nosotros y necesita un poco de tiempo para que todo se arregle”, explicó.
EFE