La Policía italiana arrestó este miércoles a 16 presuntos miembros de un clan local de la Cosa Nostra, la mafia sicilana, que había impuesto su control en el sector del envasado de frutas y verduras.
A los detenidos se les imputan delitos de “asociación criminal de tipo mafioso, complicidad externa en asociación mafiosa” o en actos “de amenaza o violencia“.
También se les acusa de “intento de homicidio, extorsión, posesión ilegal de armas“, así como de “tenencia, transporte y venta de estupefacientes”, todos ellos considerados como “delitos con el agravante de fines mafiosos“.
Según una nota oficial, la operación se llevó a cabo en las localidades sicilianas de Ragusa, Iblea y Etna y las pesquisas, entre 2016 y 2023, “habrían permitido reconstruir la dinámica delictiva de la asociación criminal atribuible a un clan liderado por Emanuele Greco, quien fue ya condenado por asociación mafiosa e intento de homicidio.
Este se encontraba en arresto domiciliario desde 2021 y volvió a ser arrestado en la operación de este miércoles, al sospecharse que seguía comandando las actividades mafiosas del grupo desde su casa, que también usaba para reunirse con otras bandas criminales del área.
Greco, según la Policía, restableció lazos con otros grupos de la Cosa Nostra en la región, así como con importantes empresarios del sector del embalaje, “asumiendo su papel de referencia de la asociación mafiosa y reafirmando su influencia en el territorio“.
El grupo de Greco empleaba “la agresión y la fuerza militar” para hacerse con la gestión del sector de producción y comercialización de envases para frutas y hortalizas.
De acuerdo con la investigación, sus métodos condicionaron “la libre competencia” y perjudicaron a varias empresas familiares.
De esta manera, “la banda criminal habría seguido imponiendo su liderazgo dentro del lucrativo sector del mercado local” y “la venta de materiales y envases de frutas y verduras“.
En sus pesquisas, la Policía también detectó “connivencia de empresas del sector de la comercialización de productos petrolíferos que, gracias a su red de relaciones del jefe del clan, habrían logrado obtener suministros de combustible de origen ilícito“.
Esto ayudó a estas compañías a “aumentar su volumen de negocios al poder contar con la contabilidad derivada de los combustibles a bajo coste“. EFE