Estados Unidos afirmó este jueves que los países del G7 han hecho “buenos avances” en las negociaciones para conceder un préstamo a Ucrania que se financiaría con los activos rusos inmovilizados en todo el mundo y que podría haber un acuerdo este mismo jueves durante la cumbre que se celebra en Italia.
Poco antes de que empezara oficialmente esa cita, el asesor de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, Jake Sullivan, dijo que ha habido “buenos avances” en las negociaciones entre las delegaciones de los países del G7 y que, en la reunión de líderes de hoy, probablemente haya ya una “visión común sobre el camino a seguir”.
Según indicó Sullivan, en la cumbre solo se llegará a un acuerdo marco y los detalles serán pactados posteriormente por los países implicados.
El Gobierno de Joe Biden ha impulsado con ahínco esta propuesta para garantizar la financiación de Ucrania en 2025, protegiéndola de los vaivenes políticos de los países del G7, sobre todo en Estados Unidos, donde el expresidente Donald Trump (2017-2021) podría regresar a la Casa Blanca tras las elecciones de noviembre.
La propuesta impulsada por EE.UU. implica usar para el préstamo a Ucrania los beneficios de los 260.000 millones de euros de fondos del banco central ruso que fueron congelados en todo el mundo, la mayor parte en la Unión Europea (UE) y especialmente en Bélgica, tras la invasión rusa de Ucrania en febrero de 2022.
En vez de confiscar esos fondos para entregarlos directamente a Kiev, los países del G7 quieren conceder a Ucrania un préstamo -valorado en hasta 46.000 millones de euros- que se financiaría con los intereses acumulados con el tiempo de esos activos, que Washington considera sin dueño pero Moscú reivindica como propios.
Hasta ahora, el punto de discordia entre países del G7 ha sido quién sería el responsable último del préstamo a Ucrania en caso de que no pueda ser pagado o si la guerra termina antes de lo previsto, lo que podría conllevar el descongelamiento de los fondos rusos.
La UE ha dejado claro que se niega a avalar los créditos y asumir el riesgo de un posible impago, ante lo que EE.UU. lleva días explorando otras vías de financiamiento -incluido con entidades privadas- para convencer a sus socios y lograr el préstamo para Ucrania.
La secretaria del Tesoro de EE.UU., Janet Yellen, afirmó este jueves en un artículo de opinión publicado en The New York Times que el préstamo a Ucrania mandaría un “claro mensaje” al presidente de Rusia, Vladímir Putin, de que Occidente está con Ucrania “por un largo periodo”.
“Es hora de que Estados Unidos y nuestros aliados liberen el valor de los activos rusos inmovilizados para que Ucrania pueda obtener el apoyo financiero que necesita urgentemente”, aseveró Yellen, quien ha liderado los esfuerzos de Washington para lograr el préstamo a Ucrania.
La cumbre de los países del G7, integrado por Estados Unidos, el Reino Unido, Canadá, Francia, Alemania, Italia, Japón y la Unión Europea, empieza este jueves en el resort de lujo ‘Borgo Egnazia’, en la región de Apulia (sur de Italia) y concluirá el sábado.
Además de los líderes de las siete democracias, acudirán a la cita jefes de Estado y de Gobierno de otras naciones como el presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, quien este mismo jueves tiene previsto reunirse con su homólogo de Estados Unidos, Joe Biden, con el que firmará un acuerdo bilateral de seguridad. EFE