Los videojuegos, que una vez fueron considerados un pasatiempo para niños y adolescentes, se han convertido en una industria que mueve millones de dólares y atrae a personas de todas las edades y culturas. Con la creciente popularidad del sector, no resulta sorprendente que Hollywood haya decidido subirse a esta ola de éxito.
Por: La Nación
No es un amor reciente. La industria cinematográfica estadunidense está fascinada con los videojuegos desde hace años. La razón es simple: los videojuegos son una forma de entretenimiento increíblemente popular y lucrativa. Al llevarlos a la pantalla grande, Hollywood tiene la oportunidad de aprovechar una base de fans enorme y, al mismo tiempo, de atraer a una nueva audiencia al cine.
Pero más allá del dinero y de la gran cantidad de seguidores de los videojuegos, la experiencia inmersiva de este sector es otro gran atractivo para los creativos de Hollywood. Es que los videojuegos ofrecen una forma única de contar historias. A diferencia de las películas o de los programas de televisión, los videojuegos les permiten a los jugadores sumergirse en mundos virtuales y tomar decisiones que afectan el resultado de la historia. Esta interactividad ha demostrado ser increíblemente atractiva para los usuarios y es algo que la industria de cine está evaluando sumar a la experiencia.
Cuestión de números
Si de hablar de los exponentes de este fenómeno se trata, los dos de los mayores íconos del mundo gamer, Mario Bros. y Sonic, estuvieron a la cabeza. Las exitosas películas de estos personajes emblemáticos de Nintendo y Sega marcaron un punto de inflexión en la relación entre la pantalla grande y los videojuegos, estimulando la producción de nuevas adaptaciones.
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