Autoridades de una universidad autónoma de Maracay, estado Aragua (norte), censuraron e impidieron culminar la grabación de un episodio del podcast A Medias, que es conducido por la politóloga Ana Milagros Parra y el comunicador social Ricardo Del Búfalo.
Por: Espacio Público
El hecho ocurrió el 7 de junio en uno de los auditorios de la universidad, que no fue mencionada en la edición final del episodio por seguridad, donde los conductores se presentaron en vivo ante estudiantes de ese recinto como parte de una gira universitaria para promover e informar sobre los derechos políticos de la ciudadanía.
En la grabación final del episodio de A Medias, en el que se hablaba de la defensa del voto de cara a la elección presidencial del 28 de julio, Parra y Del Búfalo dijeron que no sabían ni entendían lo que estaba pasando cuando personal de la universidad ingresó al auditorio y solicitó cortar la grabación.
“La productora nos dice que cortemos; sube uno de los profesores e informa que por órdenes de arriba tenemos que cortar el episodio y terminarlo porque era un acto político y no se permiten actos políticos en la universidad. Nosotros argumentamos que no era un acto político, sino informativo”, dijo Del Búfalo.
El comunicador dijo que los profesores le pidieron a ambos retirarse del campus porque su presencia allí podía ser peligrosa para la universidad. Además, pidieron cortar toda mención a la universidad ubicada en Maracay. Al momento de la interrupción, ya habían transcurrido 50 minutos del episodio y llegaba el momento de micrófono abierto para las y los estudiantes asistentes.
“Cuando empezamos el episodio dijimos que queríamos que sientan y sepan que este es un lugar donde pueden expresarse, la parte más bonita de los episodios en vivo. Me llama la atención que vino desde arriba la orden, los profesores estaban apenados”, dijo Parra al recordar el suceso.5
Los medios digitales y las universidades son de los pocos espacios en los que las y los jóvenes pueden informarse sin censura y expresarse libremente, ante el hostigamiento, las presiones y los cierres a medios tradicionales. La acción ejecutada por las autoridades de la universidad violó el derecho a la libertad de expresión de los conductores de A Medias Podcast y de la población estudiantil, así como su derecho a acceder a la información.