El huracán Beryl, en el océano Atlántico, creció este domingo hasta la categoría 4 en la escala de Saffir-Simpson, informó el Servicio Meteorológico Nacional (SMN) de México, que aún no prevé riesgos para el territorio mexicano por este fenómeno.
“El huracán Beryl se ha intensificado a huracán categoría 4 en la escala de Saffir-Simpson”, advirtió el organismo de la Comisión Nacional del Agua (Conagua) del Gobierno mexicano en su último reporte.
Con corte a las 10:00 hora local (16:00 GMT), el Servicio Meteorológico mexicano ubicó el centro del huracán 3.590 kilómetros (km) al este-sureste de las costas del sureño estado mexicano de Quintana Roo y 565 km al este-sureste de Barbados.
Aun cuando Beryl se intensificó a la categoría 4 en menos de 24 horas, lejos del pronóstico, las autoridades mexicanas descartaron, de momento, que represente un peligro para el territorio mexicano.
Las autoridades habían reportado a las 06:00 hora local (12:00 GMT) que el huracán se había intensificado a la categoría 3, luego de que el sábado se convirtiera en el primer huracán de la temporada 2024.
El viernes pasado, el Servicio Meteorológico mexicano identificó a Beryl como la depresión tropical Dos, pero solo este domingo ha escalado de la categoría 2 a la 4 en casi siete horas.
De acuerdo con el SMN de la Conagua, Beryl, uno de los 21 fenómenos esperados tan solo en el océano Atlántico para la temporada 2024, continúa su desplazamiento hacia el oeste a 33 kilómetros por hora (km/h).
Además, indicó que presenta vientos sostenidos de 215 km/h y rachas de hasta 260 km/h.
De acuerdo con el pronóstico del SMN, Beryl se intensificaría hasta la categoría 4 el lunes; sin embargo, ahora las autoridades esperan que sea este el martes cuando reduzca su intensidad en el mar del Atlántico.
La última actualización del SMN apuntó que reducirá su intensidad a partir del martes y que sea hasta el próximo viernes cuando se aproxime a las costas de la Península de Yucatán como un huracán categoría 1.
Si bien Beryl es el primer huracán de la temporada, es el segundo fenómeno hidrometeorológico en lo que va del año, tras el paso de Alberto, que dejó afectaciones por lluvias e inundaciones en el norte de México.
EFE