El huracán Beryl, que ayer subió a categoría 5, continúa su desplazamiento por el Caribe y este martes pasará por costas colombianas, cerca de la península de La Guajira, generando fuertes ráfagas de viento y aumento de precipitaciones, pero sin tocar tierra.
Las últimas estimaciones de la Unidad Nacional de Gestión del Riesgo, mantienen la categoría amarilla de “aviso” a los departamentos caribeños de Magdalena, Atlántico, Bolívar y para las islas de San Andrés, Providencia, Santa Catalina y los cayos, por “las alteraciones probables de las condiciones oceánicas y las lluvias que podrían presentarse”.
Se espera que este huracán pueda traer vientos máximos de 260 kilómetros y se desplaza a 35 kilómetros por hora, dejando olas de hasta 3,4 metros.
“Actualmente en el mar Caribe, se observa una altura de la ola significativa de 1.5 a 3.4 metros (Mar 4-5), vientos de dirección este-noreste con velocidades de 17 a 25 nudos (Fuerza 4-6)”, apuntó la UNGRD en su último boletín.
La influencia del huracán se verá sobre todo en horas de la mañana en la zona norte del litoral Caribe colombiano donde “se espera un paulatino aumento de la altura del oleaje y la velocidad del viento” y “no se descarta se presenten condiciones de tormenta tropical para la zona marítima y costera de La Guajira, por lo cual se mantiene alerta de aviso para este sector”.
Ante este fenómeno, las autoridades tienen activos los protocolos y han recomendado acciones de preparación en la costa, así como mantenerse atentos por los cambios en la altura del oleaje tanto en la costa Caribe como en el archipiélago de San Andrés, Providencia y Santa Catalina.
Por el momento, no hay afectaciones aéreas por el huracán.
Este año el Atlántico tendrá una temporada de huracanes muy por encima del promedio, con la posibilidad de hasta 13 huracanes, de los cuales hasta siete pueden ser de categoría mayor, según la Oficina Nacional de Administración Oceánica y Atmosférica (NOAA, en inglés) de Estados Unidos. EFE