Debido a la falta de mantenimiento en las tuberías principales del Acueducto Regional del Táchira (ART) y a las lluvias presentadas en los últimos días que ocasionaron deslizamientos de terreno en el sector Samparote del municipio Sucre, nuevamente se registró la rotura de una tubería matriz dejando sin servicio de agua a gran parte de la población del estado Táchira, que depende del ART, una crisis que aún se desconoce por cuántos días se mantendrá.
Luz Dary Depablos / Corresponsalía lapatilla.com
En los últimos meses, se han presentado, al menos, siete roturas en varias tuberías, incluso, de hasta 56 pulgadas. Esta situación ha tomado por sorpresa a miles de familias tachirenses que pensaban que al iniciar el periodo de lluvias volverían a recibir el servicio sin ningún inconveniente, pero la situación pareciera no cambiar, pues aún se desconoce cuándo será restablecido el servicio.
Cabe destacar que el pasado mes de junio habitantes del municipio Francisco de Miranda también advirtieron ante el Consejo Legislativo Regional que se requería con urgencia trabajos de mantenimiento en una tubería matriz ubicada en el sector La Pérez.
De no atender esta situación, San Cristóbal podría quedarse sin agua, pues la tubería está muy deteriorada, por lo que también podría romperse y agudizar la crisis de agua que se padece en el Táchira.
Sin agua en Ureña
Los más afectados y quienes han padecido la crisis del agua por más de ocho años son unas 5.000 familias de, al menos, 15 barriadas del municipio Pedro María Ureña en la frontera del estado Táchira, donde no volvieron a recibir agua por tubería, pese a que dependen de un acueducto rural y del ART.
“Ya parecemos camellos”, exclamó José Sánchez, quien reside en el barrio El Cementerio del municipio Pedro María Ureña. Denunció que desde ocho años a su vivienda no llega el agua por tubería y cada 25 días es que le abastecen solo 2.000 litros cuando responde a las solicitudes que hacen a través de la aplicación VenAap.
Freddy Flores del barrio El caney y María Flores del barrio Plaza Vieja, también manifestaron que desde hace ocho años no llega agua por tubería a sus hogares, por lo que cada vez les resulta más difícil comprar cisternas. Últimamente han aprovechado recoger agua de lluvia, pues las autoridades locales y regionales no dan una solución a sus peticiones.
El concejal Carlos Taborta exige que se haga una contraloría al personal asignado por Hidrosuroeste en la frontera, pues cuestiona por qué algunas barriadas no presentan tanta escasez. “No existe un plan de contingencia de abastecimiento por cisterna que sirva para solventar el problema”, acotó.
“En algunos sectores se requiere suministro de los ciclos de abastecimiento por más de 36 horas, pero la mayoría de las veces no supera las cuatro horas”. Esto también ocasiona que centenares de familias no puedan recibir el servicio, por lo que a su juicio Hidrosuoeste debe cambiar el personal encargado de la parte operativa, a fin de establecer una sectorización adecuada y así por lo menos algunas familias puedan acceder al agua de tubería, hasta que las autoridades den una solución viable a la crisis hídrica que se padece en la frontera.