Tal como ha ocurrido en todo el recorrido de la gira de María Corina Machado por Venezuela, en Táchira no solo cerraron vías y abrieron inmensos huecos para evitar que seguidores la acompañaran, sino también fue evidente la persecución contra sectores vinculados a la visita de la “dama de hierro” en este estado andino, donde destacó la privativa de libertad a cuatro meseros que fueron contratados a través de un servicio de catering, para servir la comida a la líder opositora y a la comitiva que la acompañó durante los días 27 y 28 junio, cuando se hospedaron en la vivienda de un empresario tachirense.
Luz Dary Depablos / corresponsalía lapatilla.com
La residencia donde se hospedó María Corina, en Palmira, municipio Guásimos, “fue asaltada el día 4 de julio en la madrugada. Amordazaron a los vigilantes y llevaban una pimpina (bidón) de gasolina para incendiar el camión en el cual ella se movilizó por las calles de San Cristóbal, especialmente por la 5ta avenida, golpearon a los vigilantes, se llevaron los equipos de transmisión y amenazaron de muerte a otro de ellos. Es un hecho muy grave, que forma parte de un proceso de intimidación”, denunció el defensor de los derechos humanos, Walter Márquez.
“Ocho delincuentes armados, que se presume sean de organismos de seguridad del Estado por las características y las armas que portaban” para el momento en que ingresaron a la propiedad privada, señaló el defensor de los DDHH.
Márquez también enfatizó que se trató de una detención arbitraria en el caso de los mesoneros del servicio de catering, a quienes además le decomisaron su vehículo de trabajo.
Igualmente, mencionó que varios transportistas que prestaron el servicio de traslado a grupos de ciudadanos que pagaron por sus propios medios para asistir a la concentración de MCM, también fueron detenidos y sus unidades fueron retenidas por una semana.
“Estamos en presencia de un crimen de persecución, de acuerdo al Estatuto de Roma de la Corte Penal Internacional. Ante esta situación, el Comité contra la Impunidad en Venezuela autorizó que en conjunto a la Fundación El Amparo, se documentara y se denunciara estos hechos ante instancias nacionales e internacionales”, expresó Walter Márquez.
Exhortó al gobernador chavista, Freddy Bernal, a garantizar los derechos políticos y electorales de todos los venezolanos para que haya paz en el estado. “Creemos en la alterabilidad democrática. Si ustedes ganan democráticamente se respetará, pero si gana democráticamente la oposición, como estamos absolutamente seguros, esperamos que respeten la voluntad popular”, acotó.
Recordó que los restaurantes Plaza Real, T-burger, Punta del Este Drill y El Rincón del Caballista, ubicados en San Cristóbal y propiedad de varios activistas de organizaciones políticas que apoyan la candidatura de Edmundo González en Táchira, fueron cerrados por órdenes del Seniat.
Cabe destacar que pese a la intención de incendiar el camión, que bautizaron como “CoriMovil”, pasó desapercibido por todas las alcabalas y llegó a la ciudad de Caracas, donde el candidato presidencial, Edmundo González, también lo utilizó para el recorrido de su inicio de campaña.