Durante este domingo 14 de julio, trascendió que el presidente de la Conferencia Episcopal Venezolana (CEV) y arzobispo de Cumaná, monseñor Jesús González de Zárate, junto a otros padres y voluntarios de Cáritas de Venezuela, fueron maltratados por funcionarios de la Guardia Nacional Bolivariana (GNB), quienes les pidieron que se retiraran de Cumanacoa, municipio Montes del estado Sucre.
Víctor Federico González // Corresponsalía lapatilla.com
De acuerdo con el relato de pobladores de la localidad, los funcionarios de seguridad los “corrieron” tras una eucaristía en la Iglesia San Baltazar. Afirmaron que estuvieron “a punto de golpearlos”.
Asimismo, al personal de Cáritas de Venezuela los amenazaron con “llevarlos presos”. Cabe destacar que durante los primeros días después de la tragedia de Cumanacoa, funcionarios de la Policía Nacional Bolivariana (PNB) impedían el acceso de la ayuda que llevaba Cáritas al municipio Montes.
Vale decir que hasta ahora no existe ningún pronunciamiento por parte de la máxima autoridad de la Iglesia Católica en Venezuela sobre lo ocurrido.
En este sentido, los habitantes de Cumanacoa rechazaron estos hechos y agradecieron el trabajo que la Iglesia Católica hace desde el primer día en beneficio de los afectados.
Por su parte, la Cámara de Comercio, Industria y Producción de Cumaná también rechazó lo ocurrido. “Desde la @camaradecumana condenamos el maltrato de funcionarios pertenecientes a organismos de seguridad a Monseñor González de Zarate en #Cumanacoa. Respeto a la iglesia y a las instituciones y a los periodistas”, se lee en sus redes sociales.
El legislador al Consejo Legislativo del estado Sucre (Cles), Miguel Vásquez, también se pronunció y condenó “el maltrato del poder a monseñor Jesús González de Zárate en Cumanacoa”. “Eso se parece a la expulsión de periodistas por cumplir su trabajo cubriendo la fuente. ¡Respeto para las instituciones! La represión es mal signo para la recuperación de la población”, agregó.