El miedo a hablar sobre la crítica situación de la zona comercial de Juan Griego, es tan grande como las cargas impositivas que aplican desde la alcaldía del municipio Marcano.
Dexcy Guédez // Corresponsalía lapatilla.com
Ya el cierre supera el 80 % de la otrora pujante calle La Marina, en la ciudad de los crepúsculos.
“La presión para que uno no denuncie la situación es tan fuerte como las fórmulas que aplican para que estemos al día con los impuestos municipales”, informó uno de los pocos comerciantes que subsisten, a quien el temor lo arropa.
Insistió que en caso de identificarse, las presiones serían el alto precio que tenga que pagar a la municipalidad.
“El alcalde Yul Armas no nos da ningún tipo de incentivos ni nos otorga beneficios para que nos faciliten el pago de los impuestos”, expresó otro comerciante de la zona.
Coinciden en que la situación cada día es más difícil de sostener, porque las ventas están muy bajas, lo que hace que las pocas entradas por ventas vayan a parar a las arcas municipales.
Los comerciantes afirman que solamente ven un “respirito” cuando el régimen paga los bonos.
La poca fluidez monetaria ha llevado al cierre definitivo de dos de las entidades bancarias existentes en esa zona de la isla de Margarita.
Los bancos Venezuela y Bicentenario se fueron definitivamente de Juan Griego y las tiendas siguen su racha de quiebra.
Los encargados de un bodegón lamentaron las bajas ventas en esos establecimientos.
“Solamente los viernes y quincena es cuando vemos algo de movimiento, pero muy tímido”, acotó.
Confirmaron, además, que el rimbombante anuncio sobre la aplicación de la Ley de Zonas Económicas Especiales, no ha tenido impacto alguno en Juan Griego, que desaparece en medio de las presiones, el miedo y las bajas ventas.