Funcionarios de Arizona de ambos partidos han expresado su preocupación por los resultados anunciados de las elecciones presidenciales de Venezuela.
Lo que muchos pensaban que sería una victoria aplastante a favor de Edmundo González, el candidato que se opone al líder socialista Nicolás Maduro, se anunció el domingo como una victoria de Maduro, lo que dejó a muchos venezolanos confundidos. Según un informe de Associated Press, González dijo que ha recibido más del 70% de las actas de escrutinio de las elecciones y que muestran que González obtuvo el doble de votos que Maduro.
Los países y líderes políticos de todo el país han declarado que no aceptan oficialmente los resultados de las elecciones. Antony Blinken, secretario de Estado de Estados Unidos, dijo que Washington tenía “serias preocupaciones” de que los resultados de las elecciones no reflejaran la voluntad del pueblo venezolano.
“El pueblo venezolano se presentó en masa para votar por el regreso de la democracia, las oportunidades económicas y el estado de derecho”, escribió el congresista demócrata Greg Stanton, que representa al cuarto distrito de Arizona, en X. “Maduro debe respetar la voluntad del pueblo. Estados Unidos y la comunidad internacional están observando”.
Aquí es donde los demócratas y republicanos de Arizona parecen estar de acuerdo: las elecciones deben ser libres y justas.
El líder de la mayoría del Senado de Arizona, Sonny Borrelli, dijo que los resultados de las elecciones le parecen “sospechosos”. Si bien aún no se ha publicado información sobre cómo o si se robaron las elecciones o se manipularon las papeletas, el representante de Arizona, John Gillette, dijo que conoce a dos personas que eran trabajadores electorales que entregaban urnas en Venezuela y creían que las urnas habían sido llenadas con votos fraudulentos para Maduro.
Lea más en Washington Examiner