A pesar de saber -aunque no lo dice explícitamente- que es vista por representantes del gobierno brasileño como un factor problemático en una posible negociación entre el ala más fuerte de la oposición venezolana y la administración de Nicolás Maduro, la líder democrática María Corina Machado dijo, en entrevista con GLOBO, reconocer el esfuerzo de Brasil, junto a Colombia y México, para crear un espacio de mediación entre las partes.
Por Janaína Figueiredo | O GLOBO
Enfáticamente, María Corina dijo que, si este esfuerzo tiene éxito, ella será parte de las conversaciones: “Los venezolanos, para dar su visto bueno a una negociación que implicará concesiones y compromisos, exigirán ser representados por los líderes en quienes confían”.
La líder opositora dejó claro que no piensa ceder ni un milímetro en su exigencia de que se reconozca la victoria de González y ofreció a Brasil, universidades, institutos especializados y expertos en temas electorales acceso a las actas electorales que la oposición dice tener en su posesión.
“Reconozco el esfuerzo [de Brasil] y creo que es necesario que haya un espacio de mediación entre las partes para que el conflicto se resuelva pacíficamente y lo más rápido posible. Todo el mundo sabe lo que ocurrió el 28 de julio, hubo una victoria monumental de las fuerzas democráticas. Hay un deseo genuino de cambio, porque Edmundo ganó en todos los estados del país. Ganó en municipios donde ganó el chavismo en los últimos 25 años, y esta vez ganamos por amplio margen. Tuvimos una organización de la ciudadanía sin precedentes en nuestra historia. Gracias a esta organización tenemos pruebas irrefutables de la victoria de Edmundo González, que están a disposición del mundo entero”, expresó.
“Los líderes de los venezolanos son elegidos por los venezolanos, no por la comunidad internacional ni por el régimen [de Maduro]. Los venezolanos, para dar su visto bueno a una negociación que implicará concesiones y compromisos, exigirán ser representados por los líderes en los que confían, que somos Edmundo González y yo. En el pasado, Maduro elegía con quién se sentaba a la mesa de negociaciones, por eso los diálogos terminaron como terminaron. Pero esta situación es totalmente diferente, porque el régimen fue derrotado, tenemos evidencias de la derrota y el país está decidido a exigir respeto a la soberanía popular, a la verdad de lo ocurrido el 28 de julio. Este es un proceso constante que avanza. A pesar de la brutal represión, que debe ser denunciada con firmeza por todos los actores internacionales. Los países involucrados en la cuestión venezolana deben decir que esta represión es inaceptable y deben cesar”, añadió.
Lea más en O GLOBO