No, no es Fortnite, ni Minecraft, ni PUBG ni ninguno de los juegos de los que las páginas especializadas suelen hablar. Tampoco es el Zelda (más quisiéramos), Baldur’s Gate, el último Mario ni ninguna saga de las que llevan décadas triunfando en occidente. El juego más exitoso del mundo se llama Honor of Kings, una obra para móviles que el pasado mes de junio desembarcó en Europa y que merece la atención en la rentreé de esta columna.
Por: El País
El juego, desarrollado por TiMi Studios y distribuido por la omnipotente Tencent Games, atesora un periplo curioso. Un periplo atado a una idea concreta: la de que el género MOBA (Multiplayer Online Battle Arena, juego multijugador de campo de batalla en línea) también era posible en dispositivos móviles. Una idea que hoy parece obvia pero que no lo era tanto en 2015, cuando los MOBAs que triunfaban (World of Warcraft, League of Legends) lo hacían en PC. Honor of Kings apostó por ese mercado y, a la chita callando, fue creciendo hasta convertirse en el monstruo que es hoy: En 2023 se convirtió en el juego para móviles con más ingresos del año, generando la friolera de 1.580 millones de dólares (1.420 millones de euros). Cada día, juegan 100 millones de personas. Y en julio, un mes después de su lanzamiento, había conseguido en occidente 50 millones de descargas.
¿Por qué triunfa tanto Honor of Kings? Algunos de sus creadores hablan con EL PAÍS: “En mi opinión, hay varias razones por las que se ha convertido en uno de los juegos móviles más jugados del mundo, con más de 100 millones de personas jugando cada día”, cuenta vía mail a Dean Huang, jefe de diseño del juego, que enumera: “Operamos con un enfoque Player First, y un gran ejemplo de esto es el espacio requerido para instalar el juego, que hemos mantenido lo más bajo posible”. Es decir, el juego se puede jugar tanto en los teléfonos con especificaciones más bajas como en los dispositivos más potentes. “Además, ofrecemos una lista variada de personajes jugables inspirados en diferentes”. En el lanzamiento hubo 86 héroes; es decir: la gente podía sentirse identificado con alguno de ellos. Y, evidentemente, aunque la ingente cantidad de dinero que mueve es por lo pagos opcionales (modelo freemium), el juego es gratis.
Pero hay más: “Nos hemos asociado con músicos de fama mundial como Hans Zimmer [que compuso el tema principal del juego], o marcas como Hello Kitty e incluso una colaboración para integrar a Bruce Lee en el universo del juego”, cuenta Huang. Asociaciones como estas permiten llegar a un público más amplio e interactuar con él, en una estrategia cada vez más común en juegos para móviles y que se ha extendido desde juegos como Fortnite a otros como Candy Crush. ¿Habla de productos transmedia? “No empezamos con ello en mente cuando comenzamos el desarrollo inicial”, cuenta Huang cuando se le pregunta por el posible desarrollo del universo del juego. “Pero ahora tenemos un cómic en China y hemos creado series de televisión, conciertos y colaboraciones culturales”. El camino está cada vez más concurrido y la estrategia es clara: “Continuaremos explorando y experimentando también en el mercado global y, en función del éxito del lanzamiento, exploraremos el lanzamiento de productos similares”. Puede que se esté cocinando un nuevo LoL, con apéndices como Arkane.
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