Una nueva tendencia en las transformaciones estéticas ha captado la atención de quienes buscan alterar su apariencia: la cirugía para cambiar el color de los ojos. Sin embargo, esta técnica, conocida como queratopigmentación, ha generado preocupación entre médicos y autoridades sanitarias debido a sus potenciales riesgos para la salud ocular.
¿Qué es la queratopigmentación?
La queratopigmentación es un procedimiento quirúrgico que promete modificar el color del iris a través de un proceso que se asemeja al tatuaje.
Durante la intervención, se utiliza una aguja y un láser para inyectar pigmento en la córnea, con el fin de darle a los ojos un nuevo tono. Aunque el tratamiento es realizado por profesionales de la salud, la técnica ha suscitado una creciente alarma debido a los efectos adversos que podría tener en la visión.
Procedimiento en alerta
La Academia Americana de Oftalmología ha emitido una advertencia sobre los peligros asociados con esta cirugía. A pesar de que la queratopigmentación se presenta como una opción estética innovadora, los riesgos involucrados han llevado a los expertos a recalcar que las consecuencias pueden ser severas y de largo plazo. Entre los problemas potenciales se encuentran:
-Glaucoma: Un aumento en la presión ocular que puede dañar el nervio óptico y provocar pérdida de visión.
-Infección e inflamación: El procedimiento invasivo puede desencadenar infecciones o inflamaciones severas en la córnea.
-Visión borrosa: Alteraciones en la visión que pueden afectar la claridad visual.
-Cataratas: Desarrollo prematuro de cataratas, una opacidad en el cristalino que deteriora la visión.
-Sensibilidad a la luz: Incremento en la sensibilidad a la luz, que puede causar incomodidad y dificultades visuales.
-Daños en la córnea: Lesiones que pueden comprometer la integridad y funcionalidad de la córnea.
-Pérdida de visión: En casos extremos, el daño ocular puede llevar a la pérdida parcial o total de la visión.
La queratopigmentación ha ganado popularidad en redes sociales, con personas compartiendo sus resultados y experiencias. Sin embargo, la viralidad de este procedimiento ha coincidido con un aumento en las preocupaciones de los especialistas, quienes temen que el deseo de cambiar el color de los ojos pueda llevar a decisiones apresuradas sin una comprensión adecuada de los riesgos.
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