Después de varios días hablando de posibles golpes de Estado y de persecuciones en su contra, el presidente de Colombia, Gustavo Petro, volverá este sábado a su escenario favorito al ser recibido por sus bases y movimientos sociales en la Asamblea Nacional por las Reformas Sociales, la Paz y la Unidad.
El sábado y domingo, en la Universidad Nacional en Bogotá, bajo la premisa ‘¡Sí a la democracia, no al golpe!’, los sectores afines a Petro se reunirán para debatir los ejes que “fortalecerán al ‘Gobierno del Cambio’ en el tiempo que resta” y cómo “hacer frente al golpe de Estado por parte de la derecha”.
“Este encuentro marcará la hoja de ruta de movilización local, regional, nacional e internacional para el periodo que resta del ‘Gobierno del Cambio'”, indicaron los organizadores en un comunicado.
Petro, que asumió la Presidencia el 7 de agosto de 2022, pasó ya la mitad de su mandato de cuatro años.
Según los organizadores, la asamblea de este fin de semana será “un escenario de articulación y fortalecimiento del poder popular que contribuya a un proyecto de país que le dé garantías a las y los colombianos, un país en paz, sin miedo y con derechos”.
Esta asamblea está convocada por el Comando Nacional Unitario, la Coordinadora Nacional del Cambio, el Pacto Histórico (la coalición de Petro) y la Minga Social Indígena, todas ellas afines al presidente y a las que se les han sumado otras organizaciones sociales, sindicatos y gremiales.
“Estaré este sábado al medio día en la Asamblea Nacional Popular. La coordinación de fuerzas populares es fundamental hoy. Sábado. Universidad Nacional”, confirmó el presidente en su cuenta de X, donde no dio más detalles.
Golpes de Estado y conspiraciones
Más allá de la agenda, desde la organización aseguran que el evento “busca hacer frente al golpe de Estado por parte de la derecha”, y que establecerán una “hoja de ruta de movilización local, regional, nacional e internacional”.
La teoría del golpe de Estado ha sido alimentada en las últimas semanas en varias ocasiones por el propio presidente, quien incluso llegó a afirmar el pasado sábado: “¿Se quejan de Venezuela? En Colombia avanza un golpe de Estado contra el presidente”.
Petro indicó que el Consejo Nacional Electoral (CNE) está dando pasos hacia “un golpe de Estado” al querer investigarle por las posibles irregularidades en la financiación de la campaña electoral que le llevó a la Presidencia.
Esto porque la pasada semana se conoció una investigación del CNE, revelada por el periodista Daniel Coronell en la W Radio, que concluía que la campaña electoral de Petro en 2022 violó los topes de gasto establecidos en la ley y recurrieron a fuentes de financiación prohibidas.
Durante toda esta semana, el presidente ha estado alimentando esta teoría y ayer insistió en que existe un plan para asesinarlo o para “tumbarlo” a través de un golpe de Estado y aseguró: “la orden está dada”.
“Quieren que el último día, cuando ya destituyan al presidente, como hicieron en Bolivia, como hicieron en Brasil, como hicieron en el Perú, matando gente, entonces la gente descuidada permita que el próximo presidente de la república en este periodo presidencial (2022-2026) sea el señor (Efraín) Cepeda, presidente del Senado”, agregó.
La constituyente
Esta asamblea nacional estaba prevista para el 20 de julio, cuando comenzaba el periodo legislativo, y entonces se hablaba de que podría ser el escenario donde Petro lanzara su propuesta de una Asamblea Constituyente.
La primera vez que Petro habló abiertamente de la constituyente fue el 16 de marzo en Cali, justificando que las instituciones que tiene el país “no son capaces de estar a la altura de las reformas” que propone su Gobierno y que deben superar su trámite en el Congreso.
La discusión de la Asamblea Nacional de este fin de semana girará en torno a nueve puntos, los mismos que el mandatario consideró que deberían ser abordados para la eventual convocatoria de una Asamblea Cnstituyente, aunque desde la organización aseguraron a EFE que la Constituyente no está en la agenda.
De hecho, el discurso de Petro sobre la Constituyente, que trajo las críticas de expresidentes y múltiples sectores, se fue matizando desde entonces y no ha vuelto a ser nombrada desde que el presidente nombró al nuevo ministro del Interior, Juan Fernando Cristo, quien fue parte del Gobierno de Juan Manuel Santos (2010-2018).
Cristo aseguró cuando fue nombrado que su propósito era “ver si logramos finalmente un acuerdo nacional que eventualmente puede o no -y eso surgirá de las conversaciones- terminar en la Constituyente que no se convocaría ni elegiría, sería un proceso que comienza ahora y que si llegamos a un acuerdo político nacional se elegiría en el próximo Gobierno, no en este Gobierno”, apuntó.
EFE