El presidente de Bolivia, Luis Arce, convocó este domingo al exmandatario Evo Morales (2006-2019) a dialogar y afirmó que no le dará el gusto de “una guerra civil” ante la movilización ‘evista’ que el lunes llegará a La Paz para exigir que el exgobernante sea habilitado como candidato para las elecciones de 2025.
“Han hablado de guerra civil y de derramamiento de sangre en las calles, esto excede nuestras normas de convivencia pacífica y hasta encubre una posición política de sedición que ningún gobierno toleraría, y nuestro Gobierno hasta hoy ha respondido a estas provocaciones con el llamado al diálogo”, afirmó Arce.
El gobernante hizo el anuncio en compañía del vicepresidente, David Choquehuanca, en un video que se difundió en el canal estatal y en sus redes sociales.
En las últimas horas, la Defensoría del Pueblo envió una convocatoria al Gobierno de Arce y al expresidente Morales para que ambas partes se sienten a dialogar antes de que la movilización llegue a La Paz. El mandatario dijo que está dispuesto a conversar, mientras que Morales no ha respondido.
La movilización que lidera el expresidente boliviano llegó este domingo por la tarde a la comunidad de Achica Arriba, a 35 kilómetros de La Paz, y el lunes pretende ingresar a la sede de Gobierno.
Paralelamente a su llegada, en la ciudad de El Alto, se registraron momentos de tensión entre los seguidores de Morales y quienes apoyan a Arce, que realizaban un cabildo para frenar la marcha del exmandatario.
“La persistencia de tus posiciones y tu negativa a dialogar nos hacen ver que solo te motiva una obsesión política electoral y una ambición personal de poder que se reviste de una inexistente preocupación por los problemas del pueblo”, dijo Arce, dirigiéndose a Morales.
La caminata de los seguidores del exmandatario comenzó el martes en la localidad de Caracollo, en la región andina de Oruro, para exigir su habilitación como candidato para las elecciones de 2025.
Los seguidores del expresidente sostienen que la marcha es para “salvar a la patria” ante problemas como la escasez de dólares y combustible y el encarecimiento de algunos productos básicos, y también exigen que se respeten las resoluciones de un congreso del Movimiento al Socialismo (MAS) realizado el año pasado -no reconocido por el Tribunal Electoral- en el que definieron la candidatura de Morales para el próximo año.
El Gobierno de Arce considera que la marcha promovida por Morales tiene la intención de que asuma la Presidencia del país el titular del Senado, Andrónico Rodríguez, que es afín al exgobernante, para habilitar así su candidatura.
Morales y Arce están distanciados desde finales de 2021 por diferencias en la Administración del Estado, que se profundizaron ante la necesidad de renovar la dirección nacional del MAS, aún en manos del expresidente, algo en lo que las facciones leales a ambos no han podido ponerse de acuerdo.
EFE