Estados Unidos y Argentina auspiciaron este jueves una reunión con unos 40 países para analizar qué puede hacer la comunidad internacional a fin de garantizar que la voluntad de los venezolanos, expresada en las urnas el pasado 28 de julio, sea respetada.
“Nuestro trabajo consiste en garantizar que sus voces sean escuchadas”, dijo el jefe de la diplomacia estadounidense, Antony Blinken, en la apertura del encuentro realizado en los márgenes de la Asamblea General de la ONU.
“Si tenemos un objetivo único, éste es garantizar que la voluntad y los votos del pueblo venezolano sean realmente respetados, que puedan determinar su propio futuro”, insistió ante cancilleres y representantes de la Unión Europea, Francia, España, Costa Rica o Uruguay.
Nicolás Maduro fue declarado ganador con el 52% de los votos para un tercer periodo consecutivo por el Consejo Nacional Electoral (CNE) sin presentar los resultados detallados del escrutinio, como obliga la ley, mientras la oposición denunció fraude.
Ese resultado fue validado por el Tribunal Supremo de Justicia, institución acusada, al igual que el CNE, de servir al gobierno.
Sin embargo, la oposición, liderada por María Corina Machado, publicó en un sitio web copias de cerca de 80% de las actas electorales, que demostrarían la victoria de su candidato, Edmundo González Urrutia, quien se exilió en España el 8 de septiembre luego de permanecer más de un mes en la clandestinidad.
Maduro “está haciendo todo lo que está en su mano para negarles ese derecho con el fin de reforzar su propio control del poder”, “manipuló los resultados electorales” y “dictó injustamente una orden (de arresto) contra el candidato de la oposición”, dijo Blinken.
“A Maduro no le importa su gente”, sostuvo por su parte la canciller argentina, Diana Mondino, que recordó que 7,7 millones de venezolanos han tenido que huir del país.
“La crisis que sufre el país ha sido causada por su propio gobierno”, lamentó Mondino.
Aunque muchos países se abstienen de reconocer la victoria de Maduro, la canciller argentina admitió que no sabe “qué acciones podemos tomar” para que se reconozca la voluntad de los venezolanos.
Los países asistentes, tienen previsto firmar una declaración.
Con información de AFP