Más de 14.000 jubilados en el estado Táchira viven en pobreza extrema por las pensiones de hambre que reciben, pese a haber dedicado más de 25 o 30 años de sus vidas a la administración pública.
Por Luz Dary Depablos / Corresponsalía lapatilla.com
“La situación es dramática”, dijo Emiro Díaz, presidente de la Asociación de Jubilados del estado Táchira, quien aseguró que más 5.300.000 pensionados están en el umbral de pobreza extrema desde marzo de 2022, y no hay aumento en la pensión.
“El 70 % de los pensionados viven de remesas. Sin embargo, la inflación se ha consumido lo que envían los familiares debido a que no alcanza”, manifestó.
Díaz enfatizó que la Organización de las Naciones Unidas (ONU) establece que todo aquel que recibe dos dólares diarios, estaría sumergido en la pobreza extrema, y en el caso de Venezuela, un jubilado solo recibe 130 bolívares, es decir, tres dólares al mes.
“Hoy vemos por las redes sociales a jubilados y pensionados pidiendo ayuda para poder cubrir sus necesidades de una operación o medicinas, porque todos conocemos la condición precaria de los servicios de salud pública en Venezuela”, añadió.
Recordó que más de 270.000 educadores pensionados en toda Venezuela no cuentan con una póliza de seguro de salud, por lo que familiares se ven obligados a pedir ayudas económicas a través de las redes sociales, al no tener a quién acudir.
Emiro Díaz destacó que cerca de un millón de pensionados que se encuentran fuera de Venezuela no reciben la pensión ni reciben ningún tipo de bonificación, a pesar de ser un derecho de adquirido por sus años de servicio.
Recordó que el monto de la pensión en el país, según como lo establece el artículo 91 de la Constitución de la República de Venezuela, debería corresponder a un salario mínimo acorde a la Canasta Básica, la cual supera los 500 dólares.
“Se requiere de casi 29 salarios mínimos para cubrir la canasta básica y por eso los adultos mayores han tenido que recurrir a otros trabajos a pesar de su edad, muchos han tenido que trabajar de vigilantes, otros preparando tortas, pasapalos o haciendo otra actividad, cuando deberían estar en una edad disfrutando de su pensión”, acotó.
Igualmente, señaló que debido a la crisis humanitaria compleja, muchos adultos mayores les ha tocado quedarse a cargo de sus nietos, pues muchos de sus hijos han salido del país, lo que a su juicio les aumenta el costo de la vida.
Pensionados excluidos por la gobernación de Táchira
Emiro Díaz expresó que en Táchira funcionarios de la gobernación suspendieron el bono vacacional de 40 dólares que se le pagó recientemente a los trabajadores.
“Les pagaron (el bono vacacional) a los empleados del Ministerio de Educación, pago del que fueron excluidos en todas las alcaldías y gobernaciones del país”.
Sin embargo, resaltó que hay estados en los que autoridades municipales y regionales estarían tramitando ante la Onapre el pago de este bono, por lo que piden que también se realice en Táchira.