Un equipo de documentalistas, formado por el cineasta Jimmy Chin que fue acompañado por los alpinistas Mark Fischer y Erich Roepke, lograron el descubrimiento de una bota y restos humanos que pertenecerían a Andrew Irvine, el británico que desapareció en El Everest en 1924, hace 100 años atrás.
Por: ABC
Según lo revelado por la revista ‘National Geographic’, junto a la bota de Andrew se encontró un calcetín con una etiqueta roja que tiene cosido el nombre de A.C. IRVINE.
Este descubrimiento podría ayudar a resolver uno de los grandes misterios del montañismo, el de si Irvine fue la primera persona humana que logró llegar hasta la cumbre del Everest.
Se cree que Irvine portaba una cámara en su chaleco, cuyo descubrimiento podría reescribir la historia del montañismo.
A la espera de encontrar el resto de efectos personales de Irvine, los miembros de su familia se han ofrecido a compartir muestras de ADN para confirmar la identidad del alpinista.
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