Sacar tiempo para hacer ejercicio es uno de los dilemas con los que se encuentran millones de personas. Algunas optan por ir solo fin de semana, mientras que otras por hacerlo antes o después de trabajar.
Por larazon.es
El cuerpo humano quema una gran cantidad de calorías con las actividades diarias aunque no hagamos deporte. Secándonos el pelo, conduciendo e incluso mientras dormimos nuestro organismo se encuentra en un trabajo constante. Debido a esto, muchas personas optan por alargar estas actividades diarias. Ya sea bajándose una parada de autobús antes de casa o ir caminando hasta el trabajo.
Recientemente se ha añadido el hábito de subir escaleras en vez de tomar el ascensor como forma de aumentar la actividad física diaria. Pero la duda está en si es mejor caminar o subir escaleras.
¿Por qué usar las escaleras es bueno?
Subir y bajar escaleras es un ejercicio aérobico que contribuye a la quema de grasas y añadir pasos adicionales al ajetreo diario. Esta actividad física es fácilmente integrable en la rutina diaria. Según el CEOE, “al subir y bajar escaleras no se trabajan los mismos músculos, por lo que se recomienda combinar ambas. Nos ayuda a tonificar gemelos, glúteos y cuádriceps y a reducir grasa”.
Del mismo modo afirman que “con 7 minutos diarios subiendo y bajando escaleras se cubre la actividad física diaria recomendada” y “subir dos pisos cada día equivale a perder 2,7 kilos de peso al año”. No son los únicos beneficios, pues es una actividad que ayuda a lidiar con el estrés.
Según un informe de Reino Unido de un equipo de científicos de la Universidad de East-Anglialas, las personas que declararon subir escaleras con regularidad tenían un 39% menos de riesgo de muerte por enfermedades del corazón y un 24% menos de riesgo de morir por cualquier causa.
¿Qué es más efectivo, caminar o subir escaleras?
Un investigador del departamento de Medicina Experimental y Clínica de la Universidad de Sassari concluyó que subir y bajar escaleras es más efectivo que caminar. Mediante el documental de Netflix “Vivir 100 años: los secretos de las zonas rurales” que indagó las regiones con mayor esperanza de vida del mundo se puede apreciar la diferencia. El estudió reveló que existe una relación entre la inclinación de las montañas y la longevidad. Esto se debe a que los habitantes de las zonas con mayor pendiente estaban realizando una actividad física diaria sin darse cuenta, ya que por las características de la zona debían subir y bajar constantemente.
Si partimos de la base de que subir escaleras implica un mayor gasto energético que caminar, encontramos cuál va a ser más beneficioso y cuál va a ser recomendado por expertos de la actividad física y del deporte. Y los tres motivos son claros: aumenta la esperanza de vida, mejora la condición física y recude el riesgo de muerte por enfermedades del corazón y el estrés.