La precariedad y la vocación educativa tienen una dura batalla en la Escuela La Primavera, ubicada en el sector Sabana de Guamito de la parroquia Alto Barinas, en Barinas, que puede concluir con la total deserción escolar, porque estudiar allí es un “sacrificio”.
Por: Corresponsalía lapatilla.com
Esta institución cuenta con dos aulas construidas por autogestión de la comunidad, a las cuales les faltan ventanas, puertas y pisos. Además, la escuela carece de electricidad, baños, agua, cancha deportiva, cocina, comedor y muchas cosas más, pero la comunidad educativa no pierde la esperanza en que sea tomada en consideración la petición expuesta en el año 2018 a través de la plataforma VenApp del Gobierno.
Hace días, autoridades de la Zona Educativa y Fede (Fundación de Edificaciones y Dotaciones Educativas) visitaron esta escuela, y aparte de la dotación a los docentes, llevaron 40 mesas sillas, 20 láminas de zinc y quedó el compromiso de dotar con congelador, ventilador y nevera, pero que no pueden entregar dadas las precarias condiciones de la escuela.
Al lado de las aulas de bloques está un caney, que es utilizado también para los momentos de enseñanza, donde no abruma el calor, pero es díficil estudiar ahí cuando llueve.
La comunidad ha hecho todo lo posible para cristalizar el sueño de tener una institución educativa con todos los servicios. Para eso disponen de una hectárea de terreno para que el proyecto se ejecute cuanto antes.