Un gran jurado ha acusado a un sheriff rural de Kentucky que mató a tiros a su viejo amigo juez en su despacho durante acalorada discusión, un brutal asesinato que podría hacerlo elegible a la pena de muerte.
Por New York Post
La decisión del jueves llega más de dos meses después de que el sheriff del condado de Letcher, Shawn Stines, de 43 años, fuera captado en escalofriantes imágenes de vigilancia sacando un arma y apuntándola a la cabeza del juez de distrito Kevin Mullins, momentos antes de dispararle ocho veces sin piedad.
Mullins, de 54 años, murió en la cámara donde sirvió durante 15 años.
Stines, quien se entregó inmediatamente después del tiroteo y pidió a la policía que lo “tratara de manera justa”, ahora enfrenta un cargo de asesinato de un funcionario público que podría llevarlo al corredor de la muerte, si es declarado culpable.
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