Como se lo anticipó a SEMANA, Armando Benedetti, tras una reunión en la Casa de Nariño con el presidente de Colombia, Gustavo Petro, renunció oficialmente a su cargo en la Embajada de la FAO y a partir de este martes 26 de noviembre empezará a desempeñarse como asesor político del jefe de Estado.
“Sí, yo acabo de renunciar ante el presidente de la República para tomar algunas funciones como asesor directo de él. Es tan simple de decir que es asesor del presidente. Y sobre todo en los temas políticos”, confirmó el propio Benedetti al salir de su encuentro con el jefe de Estado.
Se trata de un logro al que siempre le apuntó Benedetti desde el inicio de este gobierno, pero que solo se está materializando a menos de dos años para finalizar el periodo de la actual administración.
El deseo político de Benedetti siempre fue un secreto a voces: trabajar en la Casa de Nariño, pero primero tuvo que peregrinar por Caracas, Venezuela, y luego en Roma, Italia, para lograr aterrizar en paracaídas en el palacio presidencial.
Cuando fue embajador de Colombia en Venezuela, Benedetti se sintió menospreciado por el Gobierno Petro, a tal punto de que llegó a reclamarle de manera airada a Laura Sarabia, quien para ese entonces era la jefa de gabinete. Así quedó demostrado en los explosivos audios que reveló SEMANA en su momento.
En las grabaciones, Benedetti no solo amenazaba a Laura Sarabia, quien hoy es la directora del Dapre, con contar cómo fue que se financió la campaña presidencial de Gustavo Petro, especialmente en la Costa Caribe, sino que además le pedía que lo sacara de Venezuela.
Un año y cinco meses después de esos explosivos audios, Benedetti logró cumplir su deseo de trabajar de la mano del presidente Petro. Sin embargo, Sarabia, quien inicialmente fue su aliada, su subalterna y, al final, terminó convertida en su peor enemiga, ahora será su jefe al interior del Gobierno.
Y aunque al término de la reunión que sostuvo con el presidente Petro en la Casa de Nariño, Benedetti aseguró que la relación con Sarabia está en “rehabilitación”, está por verse qué pasará entre los dos, si habrá una implosión o una pelea de egos entre ambos y qué posición tomará el presidente Petro frente a lo que pueda suceder.
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