Cada 27 de noviembre, desde el año 1515 en tiempos precolombinos, Cumaná celebra su aniversario, gracias a la gesta del evangelizador Fray Pedro de Córdoba en representación de la corona española, siendo la primera ciudad fundada en tierra firme del continente americano.
Víctor Federico González / Corresponsalía lapatilla.com
La también conocida como “La Atenas venezolana” está conformada por aproximadamente 598 km2, y a lo largo de su historia se ha convertido en la cuna de grandes personajes como el Gran Mariscal de Ayacucho, Antonio José de Sucre; el poeta, político, escritor y periodista, Andrés Eloy Blanco Meaño, y el poeta José Antonio Ramos Sucre.
A 509 años de su fundación, los cumaneses miran el futuro de su ciudad cargados de expectativas, temores y preocupaciones en cuanto al progreso y desarrollo de la misma.
Con su rica herencia cultural, ha sido un crisol de tradiciones desde su fundación. La ciudad no solo es conocida por su historia como la primera urbe en tierra firme, sino también por su vibrante vida cultural.
Festividades como la de su patrona Santa Inés, Las Noches de Antaño y su fundación son celebraciones que reflejan la fusión de influencias indígenas y españolas.
Además, Cumaná es hogar de destacados artistas y escritores que han dejado una huella imborrable en la literatura y el arte venezolano.
La arquitectura colonial, con sus calles empedradas y coloridas casas, cuenta historias de un pasado glorioso que aún resuena en la vida diaria de sus habitantes.
Anhelos y desafíos
Para la concejal de Cumaná, Carla Segura , la capital sucrense necesita más de un regalo “de sus gobernantes y de los que conforman equipos en instituciones, gobiernos locales, concejales y legisladores que deben darle cariño no nada más hoy”.
Segura señaló que desea se cumplan las necesidades de los cumaneses en materia de servicios públicos y embellecimiento.
“Cumaná ha crecido, ya no es la de dos calles, pero su gente desea seguir creciendo más y más”, expresó en entrevista con lapatilla.com.
Además, enfatizó la necesidad de trabajar de manera colectiva por el progreso y desarrollo de la ciudad, deseando que se cumplan las necesidades y anhelos de las comunidades.
Por otro lado, el joven cantante Aquiles Romero consideró que la ciudad es capaz de brindar oportunidades para todos.
“Hay que buscar ese equilibrio, la esperanza y la manera de seguir adelante, así como lo he conseguido yo en la música y mis hermanos de El Sistema lo hemos hecho”, añadió.
Romero aseguró que la música y el talento que existe en la ciudad es fuente de motivación y esperanza para salir adelante.
Desafíos y problemas
De acuerdo con el testimonio de los habitantes de Cumaná, su preocupación reposa en la precariedad de los servicios públicos, la falta de respuesta por parte de la gestión municipal y regional, y la desinversión en cultura y arte.
A esta lista se suma el detrimento de la red de salud pública, siendo el Hospital de Cumaná el principal afectado, y la paralización de las empresas productoras e industriales.
“La vialidad, la crisis educativa y la economía también están afectando a los cumaneses hoy por hoy”, dijo Isabel Díaz, ciudadana consultada para este trabajo.
Religiosidad presente
El administrador apostólico de la Arquidiócesis de Cumaná (sede vacante), monseñor Mariano Parra, indicó que hoy es un día de alegría y celebración.
“Es motivo de alegría y orgullo, pero también es motivo de responsabilidad y trabajo para que aumente la prosperidad de la ciudad y reine la justicia, la paz y el amor, y podamos tener una primogénita que sea orgullo de toda America”
Parra invitó a todos los cumaneses y a quienes no lo son a “luchar por una ciudad próspera, justa y fraterna para que seamos ejemplo”.
Esperanzas del camino
Para el secretario privado de la gobernación de Sucre, Onny Parra, vienen tiempos de “gloria, vienen tiempos de rehabilitación de espacios, de recuperación de espacios y de dignificación para ponernos al servicio de nuestras comunidades. Ese es el llamado más sentido a nuestras comunidades, el desarrollo de una política urbanística que se ajuste a los nuevos tiempos, que se adapte a los tiempos actuales, en los cuales nosotros vamos a colocar, en primera instancia, al hombre y a devolverle una Cumaná digna, una Cumaná humana a cada uno de los pobladores de esta ciudad que hoy celebra 509 años”.
El funcionario agregó que se tratan de 509 años de religiosidad e historia que engalanan a la ciudad marinera y mariscala.
El devenir
A 509 años de su fundación, Cumaná se encuentra en un cruce entre su glorioso pasado y un futuro incierto.
Sin embargo, el espíritu indomable de sus ciudadanos brilla con fuerza. Las nuevas generaciones apuestan a reconstruir su ciudad, inspirándose en las historias de aquellos grandes cumaneses que les precedieron.
Además, con cada desafío superado, los cumaneses demuestran que, aunque las circunstancias sean difíciles, la esperanza y la unidad pueden allanar el camino hacia un futuro más prometedor.
Cumaná no solo celebra su historia, también abraza su potencial como un faro de esperanza en el corazón del Caribe venezolano.