Fiscal del Vaticano reveló que hay un informe sobre la desaparición de Emanuela Orlandi

Fiscal del Vaticano reveló que hay un informe sobre la desaparición de Emanuela Orlandi

Los manifestantes muestran fotos de Emanuela Orlandi en la plaza de San Pedro, en el Vaticano

 

 

El fiscal vaticano, Alessandro Diddi, ha revelado que existe un informe con toda la información recogida por la Santa Sede sobre la desaparición en 1983 de la joven de 15 años Emanuela Orlandi y del que hasta ahora se había negado su existencia, sobre el que es uno de los grandes misterios vaticanos.





Diddi, el promotor de justicia (fiscal) del Estado Pontificio que abrió por primera vez una investigación sobre el caso por parte del Vaticano, precisó que no puede revelar ni el autor ni el contenido, lo que sin embargo pretende hacer una vez cerrada la investigación, según explicó anoche durante la presentación de un libro.

Según algunos medios podrían tratarse de los documentos recogidos por el entonces secretario privado de Benedicto XVI, Georg Gaenswein, para intentar hacer un balance retrospectivo de la desaparición de la joven de 15 años, hija de un funcionario de la prefectura de la casa pontificia, el 22 de junio de 1983.

Pietro Orlandi, el hermano de la joven que lucha desde hace 40 años para esclarecer la desaparición de Emanuela, había asegurado que Paolo Gabriele, “mayordomo” de Ratzinger y protagonista de la filtración de los documentos confidenciales del papa, el llamado caso ‘vatileaks’, le había revelado su existencia.

El hermano de Emanuela volvió a hablar sobre la existencia de este dossier ante la comisión parlamentaria creada hace unos meses para investigar sobre la desaparición de Orlandi y de otra joven de la misma edad y en el mismo periodo, Mirella Gregori.

Emanuela Orlandi durante un concierto de flauta.

 

También Domenico Giani, excomandante de la gendarmería vaticana, confirmó ante la comisión parlamentaria que existía el informe, pero que se trata de una “reconstrucción histórica” ??del caso.

“La admisión por parte del Promotor de Justicia de la existencia de un expediente en el Vaticano sobre Emanuela Orlandi es un importante paso hacia la verdad. Es un hecho cierto, en efecto, que el Vaticano ha llevado a cabo actividades relacionadas con el secuestro de Emanuela Orlandi que nunca ha compartido ni con la familia Orlandi ni con la fiscalía de Roma”, explicó este jueves a EFE la abogada de la familia, Laura Sgro.

Añadió que “esta circunstancia, por otra parte, causa una gran decepción a la familia de Orlandi, teniendo en cuenta que en 2012 los magistrados romanos estaban llevando a cabo la segunda investigación sobre el secuestro de Emanuela y los propios jueces podrían, con miras a una colaboración leal, beneficiarse de las conclusiones del Vaticano”.

“Respetando el secreto de la investigación, cabe destacar que la familia Orlandi solicitó ver y extraer una copia de este expediente desde 2017, mientras que la investigación del Vaticano no se abrió hasta enero de 2023, unos seis años después”, explicó la abogada.

Y consideró “por tanto legítimo preguntarse: ¿quién ha conservado este expediente hasta ahora, dado que en varias ocasiones, en los años mencionados, las autoridades vaticanas informaron públicamente que no existía ningún expediente y que el de Emanuela Orlandi era ‘un caso cerrado’?”.

La familia Orlandi “espera que finalmente se den respuestas esclarecedoras, considerando las innumerables peticiones formuladas a las autoridades vaticanas y que realmente haya llegado el momento de la verdad” y que tanto “la Fiscalía de Roma como la Comisión Parlamentaria de Investigación actúen lo antes posible para solicitar la adquisición de este expediente”.

En estos 40 años se han barajado cinco posibles pistas sobre la desaparición de Emanuela Orlandi: “La trata de mujeres”, los problemas internos de la propia familia Orlandi, la “pista de los abusos del Vaticano”, “la intriga internacional con Ali Agca (que atentó contra san Juan Pablo II)” o la hipótesis del “chantaje económico” vinculado al Banco Ambrosiano y el Ior.

EFE