Para aquellos lectores que no son venezolanos, debemos aclarar que en estas latitudes se utiliza la palabra mono para referirse a una deuda, y por analogía un orangután es una deuda muy grande.
El inefable Elon Musk dijo recientemente que Norteamérica se dirige a la bancarrota a un ritmo muy rápido, refiriéndose al déficit fiscal del 2023, cuando los gastos del gobierno alcanzaron los 6,16 trillones de dólares, con ingresos de tan solo 4,47 trillones. Esta advertencia se enmarca en la continua polémica sobre el nivel de la deuda pública norteamericana que alcanzó los 34 trillones, la más alta del mundo y representa 1,23 veces el Ingreso Nacional, le sigue la del Reino Unido con 8,7 trillones.
En el contexto mundial hay unos países que tienen orangutanes, el más famoso e insospechable es Japón, cuya deuda pública es 2,56 veces el Ingreso Nacional. Causa extrañeza esta circunstancia en un país tan austero y disciplinado. Esto obedece al envejecimiento y reducción de su base poblacional, la única fórmula que encontraron para tratar de mantener un crecimiento mínimo de la economía consistió en mantener un déficit fiscal que la estimule. Sin embargo, es un caso excepcional.
Los países más endeudados del mundo, en términos absolutos, son los Estados Unidos, Reino Unido, Japón, Países Bajos, Francia, Italia, Alemania, Canadá, China, y otros más con deudas entre 1 y 2 billones. Cuando se compara la deuda con el Ingreso Nacional los más altos son Grecia con 1,62 veces; Italia con 1,37; Francia 1,10; España 1,77. Entre los países de más bajo endeudamiento están: Estonia, Bulgaria, Luxemburgo, Dinamarca, con menos de 0,30 veces el Ingreso Nacional.
En América Latina el país con más deuda es Argentina, esta alcanza 419 mil millones de dólares, y 0,85 veces del Ingreso Nacional; Brasil 0,74; Costa Rica con el 0,63, seguido por Panamá, Ecuador, Colombia y El Salvador. Los más bajos son Guatemala, Perú, Paraguay y Bolivia. El Promedio Latinoamericano es del 0,51.
La Deuda Externa Pública de Venezuela no se conoce con certeza, pero se estima que ronda los 154 mil millones de dólares. En relación con los datos del Ingreso Nacional, están igualmente sumidos en la misma opacidad, se calcula que pueda estar en 96 mil millones para 2023. De acuerdo con la información anterior, la relación de Deuda Externa Pública a PIB es de 1,60, tres veces el promedio latinoamericano, y está al nivel de Grecia que posee el más alto de Europa, o sea, en la categoría de orangután. Aunque el caso Venezolano es mucho peor que el de Grecia, porque mientras que este país paga su deuda, Venezuela está en impago o técnicamente default.
Esta es nuestra indiscutible situación actual. Sin embargo, viendo hacia adelante, de cambiar el contexto político, nuestro Ingreso Nacional actualmente tan deprimido, va a rebotar inexorablemente, sin entrar a considerar las dificultades y complejidades. Por una parte, la deuda pública externa podrá ser renegociada y pagadera, al menos parcialmente, con exportaciones petroleras tal como estamos haciendo con la Chevron, hasta alcanzar un nivel manejable. También a nuestro favor está el hecho de que no tenemos deuda privada externa, solo deuda pública y nuestra situación con el FMI, camino obligado a corto plazo, no puede ser mejor en el sentido de que no le adeudamos nada.
Como decía Teodoro Petkoff, político de izquierda, Ministro de la Oficina Central de Coordinación y Planificación durante el segundo gobierno de Rafael Caldera: “Estamos mal, pero vamos bien”.
Gerardo Lucas. Economista e Historiador. https://[email protected]