El líder supremo de Irán, Ali Jameneí, culpó este miércoles a Estados Unidos e Israel de la caída del depuesto presidente Bashar al Asad en Siria, aliado de Teherán y que formaba parte del llamado Eje de la resistencia.
“No hay ninguna duda de que lo que ha ocurrido en Siria es producto de un plan conjunto estadounidense-sionista (Israel)”, dijo la máxima autoridad política y religiosa de Irán en su primer discurso tras la huída de Al Asad del país árabe.
Jameneí afirmó que Washington y Tel Aviv son los “principales conspiradores” del derrocamiento del presidente sirio, de lo que afirmó tener pruebas.
“Tenemos pruebas de ello. Estas evidencias no dejan lugar a dudas”, aseguró en su discurso pronunciado ante “miles de personas” de diferentes ámbitos de la sociedad iraní en la mezquita Imán Jomeiní.
El religioso afirmó además que un “país vecino de Siria ha jugado un papel obvio” en el derrocamiento del presidente sirio, en una aparente velada referencia a Turquía, que apoya a parte de las milicias implicadas en la rápida ofensiva rebelde.
Irán era uno de los principales aliados de Al Asad, a quien apoyó militar y económicamente a lo largo de los años y contaba con los que denominada “asesores” militares en suelo sirio.
El país árabe formaba parte del llamado Eje de la resistencia, la alianza informal antiisraelí liderada por Irán y formada por los palestinos de Hamás, los libaneses de Hizbulá, los hutíes del Yemen y una miríada de milicias en Irak.
Siria era el único Estado que formaba parte de esa alianza y jugaba un importante papel porque daba a Irán acceso directo a Hizbulá.
Las autoridades iraníes han reconocido que la caída de Al Asad, quien huyó a Moscú, supone un golpe para el Eje de la resistencia, cuyos integrantes han atacado a Israel desde el comienzo de la guerra en Gaza en octubre de 2023.
Tras la toma de la capital por parte de la coalición liderada por el islamista Organismo de Liberación del Levante (HTS, en árabe), la embajada iraní en Damasco fue saqueada el domingo, aunque ya había sido desalojada. EFE