Venezuela rechazó las sanciones anunciadas este martes por Canadá -que calificó como “medidas extorsivas”- contra cinco funcionarios del país caribeño, entre ellos, la presidenta del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ), la chavista Caryslia Beatriz Rodríguez, a la vez que llamó “peón disminuido” de Estados Unidos al Gobierno de Justin Trudeau.
“Venezuela rechaza de manera contundente las medidas extorsivas en contra de funcionarios venezolanos que pretende imponer el Gobierno de Canadá, una acción que confirma, una vez más, su papel servil como esclavo de los intereses imperiales de Estados Unidos”, dijo el Ejecutivo del presidente Nicolás Maduro en un comunicado.
Además de Rodríguez, Canadá sancionó a Juan Carlos Hidalgo Pandares, juez del TSJ; Rosalba Gil, rectora principal del Consejo Nacional Electoral (CNE); Edward Miguel Briceño Cisneros, juez; y Luis Ernesto Dueñez Reyes, fiscal, por “socavar la democracia” en el país caribeño, que vive una crisis política tras la proclamación de la cuestionada reelección de Maduro en los comicios de julio.
A juicio de Caracas, estas acciones “ilegales” son “un intento fallido de presionar a Venezuela, demostrando la humillación y el descrédito internacional del Gobierno canadiense, que se reduce a actuar como un peón disminuido y subordinado” a Washington.
Asimismo, expresó que, mientras Canadá “se arrodilla ante las órdenes” de EE.UU, Venezuela “se mantiene firme, soberana e inquebrantable, defendiendo la voluntad del pueblo venezolano y el Estado de derecho, sin atender a chantajes externos ni injerencias vergonzosas”.
La ministra de Exteriores de Canadá, Mélanie Joly, declaró que su nación “no se quedará quieta mientras el régimen de Maduro sigue ignorando la voluntad democrática del pueblo venezolano”.
Pese al resultado oficial en favor de Maduro -anunciado por un organismo electoral, que todavía no ha publicado los votos desglosados, como establecía el cronograma-, la mayor coalición antichavista -la Plataforma Unitaria Democrática (PUD)- reclama la victoria de su candidato, Edmundo González Urrutia.
Para la ministra canadiense, es necesario que los venezolanos negocien una solución pacífica a la crisis, y aseguró que Canadá está lista para trabajar con la región para apoyar ese diálogo.
“Pero también estamos preparados para usar las herramientas a nuestra disposición, incluidas las sanciones, para imponer costes a los que buscan prevenir la expresión total de los derechos democráticos venezolanos”, añadió.
Las sanciones congelan los posibles activos que los individuos tengan en Canadá y prohíben que personas y entidades radicadas en el país norteamericano, o canadienses en el extranjero, mantengan relaciones económicas con los sancionados.
Por EFE