La vigencia de una Constitución violada y ultrajada por sus progenitores: A 25 años de violaciones de DDHH

La vigencia de una Constitución violada y ultrajada por sus progenitores: A 25 años de violaciones de DDHH

El proceso constituyente de 1999 en Venezuela, que culminó con la aprobación de la Constitución vigente el 15 de diciembre de ese año, ha sido objeto de análisis y controversia desde diferentes perspectivas. Este marco constitucional fue presentado como un paso hacia la refundación del país, con énfasis en la participación ciudadana y la ampliación de derechos fundamentales.
Por Elsa Muro
Sin embargo, los acontecimientos políticos y sociales subsecuentes han generado críticas severas respecto a su implementación y al impacto que ha tenido en la institucionalidad democrática del país.
Entre las principales señalamientos que se han señalado están:
1.Manipulación del proceso constituyente:
•Desde su inicio, el proceso fue considerado por sectores de la oposición y analistas independientes como parcializado y diseñado para concentrar poder en el Ejecutivo.
•El manejo de recursos públicos y la utilización del aparato estatal para promover intereses políticos fueron denunciados.
2.Concentración de poder y erosión institucional:
•La Constitución de 1999 estableció un sistema presidencialista reforzado que, en la práctica, facilitó la acumulación de poder en manos del presidente Hugo Chávez y sus sucesores.
•Esto derivó en el debilitamiento de instituciones fundamentales, como el Poder Judicial, el Legislativo y organismos de contraloría.
3.Violación de los derechos humanos y del Estado de Derecho:
•Si bien el texto constitucional incorporó garantías progresistas en materia de derechos humanos, su aplicación ha sido inconsistente, por no decir nula. Diversos informes de organismos internacionales han documentado violaciones sistemáticas.
•La persecución a disidentes, la censura, y la militarización de funciones civiles son ejemplos de esta problemática.
4.Crisis económica y social:
•La falta de transparencia, el manejo ineficaz de recursos públicos y la corrupción han exacerbado la crisis económica y social del país.
•Esto ha derivado en un deterioro severo de las condiciones de vida de la población y un éxodo masivo de venezolanos.
El contexto descrito refleja el deterioro sostenido de las instituciones democráticas y del Estado de derecho en Venezuela desde la aprobación de la Constitución de 1999. Aunque ese texto fue concebido para fortalecer la participación ciudadana y garantizar derechos fundamentales, su implementación ha sido manipulada para consolidar un régimen autoritario. Los aspectos mencionados evidencian una crisis institucional, política y social que ha impactado tanto a los venezolanos como a la comunidad internacional.
Puntos destacados del panorama actual:
1.Sistema de justicia como herramienta de persecución:
•La instrumentalización del sistema judicial para reprimir a disidentes, encarcelar opositores políticos, y violar derechos fundamentales refleja el colapso del Estado de derecho.
•La creación de figuras como la “justicia comunal” y leyes que centralizan el poder en estructuras paralelas socavan aún más la representación democrática.
2.Control social mediante el terror:
•El uso del miedo, la tortura, desapariciones forzadas, y la cooptación de las instituciones de seguridad y justicia recuerdan prácticas de regímenes totalitarios históricos.
•Este clima de represión ha generado el silencio forzado de muchos ciudadanos, incluso de quienes podrían expresar rechazo al régimen.
3.Secuestro de la soberanía popular:
•El desconocimiento de la voluntad mayoritaria expresada en procesos electorales y otras instancias de participación democrática ilustra un régimen que opera fuera de la legalidad constitucional.
•Leyes como la de “Justicia Comunal” consolidan estructuras que desvirtúan los principios democráticos al concentrar poder en entidades controladas por el Ejecutivo.
4.Impacto internacional:
•Venezuela pasó de ser un ejemplo de defensa de los derechos humanos y el derecho al asilo a convertirse en un país señalado por violaciones sistemáticas de derechos.
•Los llamados de los venezolanos al mundo democrático son un grito de auxilio ante un régimen que ha secuestrado la posibilidad de cambio por vías institucionales.
Llamado a una Venezuela libre y democrática
La lucha por la democracia en Venezuela no solo representa un desafío interno, sino un llamado a la solidaridad internacional. La comunidad democrática mundial, incluyendo aquellos países con tendencias autoritarias, tiene la responsabilidad de rechazar las prácticas de un régimen que amenaza la estabilidad de la región y que vulnera los derechos fundamentales de su pueblo.
Conclusión:
Los 25 años de la Constitución de 1999 no se celebran como un hito democrático, sino como un recordatorio del desmantelamiento de sus principios fundacionales. El pueblo venezolano continúa exigiendo un cambio hacia una Venezuela verdaderamente libre y democrática, que recupere su lugar como referente de derechos humanos y justicia en la región.
Lo sucedido a partir de 1999 evidencia un contraste entre las promesas iniciales de la Constitución y su implementación práctica. Aunque en teoría sentaba bases para un Estado más inclusivo y participativo, los acontecimientos posteriores han mostrado que, en la práctica, se ha convertido en un instrumento para consolidar un modelo de gobierno autoritario y centralizado, con profundas consecuencias para la democracia y los derechos humanos en Venezuela.