Edgard Romero Nava: La Costa Oriental del Lago y el muro de contención

Edgard Romero Nava: La Costa Oriental del Lago y el muro de contención

La intensiva extracción de petróleo, por décadas, en terrenos a la ribera oriental del Lago de Maracaibo, produjo una compactación en la superficie, que se denomina subsidencia.

Ello obligó a las transnacionales, a construir un muro de contención, para evitar la inundación de tierras contiguas donde se desarrollaron comunidades y se construyeron ciudades a orillas del Lago.

Esta situación de peligrosidad por inundaciones, incluye a parte de Cabimas, Tía Juana, Ciudad Ojeda, Lagunillas; y Bachaquero.





Desde antes de la nacionalización petrolera, en 1975, ya la compañía Shell de Venezuela, empresa de origen anglo holandesa, que había construido y mantenía el muro, debido a que las tierras contiguas, estaban metros por debajo del nivel del Lago y se planteada la construcción de una nueva Ciudad, lejana a orilla del Lago de Maracaibo.

Al nacionalizarse la responsabilidad y mantenimiento, le corresponde ser ejecutada por PDVSA.

Llama la atención la alerta de mes pasado de: “ LA ACADEMIA NACIONAL DE LA INGENIERÍA Y EL HÁBITAT SOBRE LA VULNERABILIDAD Y RIESGOS DEL SISTEMA DE PROTECCIÓN DE LA COSTA ORIENTAL DEL LAGO DE MARACAIBO, donde publica que:

La Academia Nacional de la Ingeniería y el Hábitat, en concordancia con lo establecido en su ley de creación, cumple con el deber de dar a conocer su opinión, y alertar y formular recomendaciones a los organismos competentes, sobre un asunto de relevante interés público asociado al potencial riesgo de un desastre de importante magnitud, en el caso eventual de colapso de secciones de los diques de protección construidos en la Costa Oriental del Lago de Maracaibo (COLM). Región esta que incluye las poblaciones de Cabimas, Tía Juana, Ciudad Ojeda, Lagunillas y Bachaquero, la cual es responsable del 65% – 70% de la producción nacional de petróleo.

Tal efecto obligó, en el año 1932, a iniciar el proyecto y construcción de un sistema de protección conformado por diques de contención de tierra, debidamente diseñados, con fines de prevenir situaciones de inundación en las áreas ocupadas por la población y por la actividad petrolera.

Actualmente las instalaciones petroleras y amplias zonas habitadas, están ubicadas a unos 5-6 metros por debajo del nivel del lago, en extensión aproximada a unas 11.300 hectáreas y con una población alrededor de 100.000 habitantes.

Por tales razones es de extrema importancia, entre otras actividades, el seguimiento y monitoreo detallado de los diques de contención existentes para sus modificaciones geométricas y técnicas correspondientes.

El efecto de subsidencia se ha manifestado con la presencia de grietas en la superficie, tensiones en las juntas de las planchas que conforman los tanques de almacenamiento de petróleo, desniveles y saltos en los muros de contención construidos alrededor de esos tanques, desplazamientos verticales de hasta 20 centímetros en los patios de tanques, evidencias de desplazamientos horizontales y deformaciones en los indicados tanques con la ovulación de su forma cilíndrica, y ha modificado en general el patrón natural de drenaje.

Igualmente, dicho fenómeno ha sido responsable de emanaciones y explosiones de gas y volcanes de barro, de hasta 8 metros de altura.

Por sus características, la subsidencia y sus efectos configuran una problemática de alta complejidad geológica y geotécnica.

“Las consecuencias desastrosas de la eventual ruptura de sectores de los diques costaneros, implicaría cuantiosas pérdidas humanas y económicas, y al considerar informaciones confiables en cuanto a que la red sismológica instalada no está activa desde hace unos 15 años, y que el sistema de monitoreo de los diques está inoperativo, han motivado a la Academia Nacional de la Ingeniería y Hábitat a elaborar la presente declaración.”

Continúa la alerta con “La referida gestión del riesgo es de vital importancia para resguardar la población que habita en terrenos por debajo del nivel del lago de Maracaibo, proteger cuantiosas inversiones industriales y comerciales valoradas en más de 10.000 millones de dólares estadounidenses, permitir el restablecimiento de la producción petrolera que llegó a extraer 1.5 millones de barriles/día en la zona, y posibilitar el desarrollo de más de 500 kilómetros cuadrados de suelo con vocación agrícola y pecuaria.”

“Adicionalmente a las citadas recomendaciones, la Academia Nacional de la Ingeniería y el Hábitat hace un llamado a la Gerencia de Diques y Drenajes de Petróleos de Venezuela Sociedad Anónima (PDVSA) y a todos los organismos con competencia en la materia, en cuanto a la necesidad de informar a la ciudadanía y particularmente a todos los habitantes del área, sobre las acciones que se han tomado hasta la fecha con los resultados correspondientes “y aquellas actividades que están en pleno desarrollo, incluyendo la programación de nuevas acciones orientadas a minimizar los riesgos.” “En este contexto, la Academia Nacional de la Ingeniería y el Hábitat ratifica su voluntad de asistencia en lo que sea apropiado para la implementación de las recomendaciones propuestas, y reitera su disposición de colaborar, amplia y desinteresadamente, con las autoridades.”

Esperamos que las autoridades se ocupen de prevenir tan peligrosa situación

@eromeronava