El derrumbe de un puente, ocurrido el pasado domingo 22 de diciembre en el norte de Brasil, dejó al menos 10 muertos y siete desaparecidos, según un nuevo balance publicado este viernes 27 de diciembre.
La viga central del puente Juscelino Kubitschek de Oliveira, principal conexión entre los estados de Maranhao (noreste) y Tocantins (norte), se desplomó sin que por ahora se conozcan las causas.
Los equipos de rescate encontraron un cadáver en el río Tocantins, este 27 de diciembre, mientras que otro fue localizado la noche del jueves 26 de diciembre, a seis kilómetros del lugar del accidente, según informó la Marina. “Así, se confirman 10 fallecidos y siete personas desaparecidas, hasta el momento”, indicó en una nota.
El pasado jueves 26 de diciembre, el saldo era de ocho muertos y nueve desaparecidos por el desplome del puente, construido en los años 60 y de unos 500 metros de longitud.
Más de 70 rescatistas continuaron las búsquedas de las personas desaparecidas, incluyendo el uso de una “cámara hiperbárica” para poder hacer inmersiones a profundidades mayores a 30 metros, según la Marina.
Las autoridades advirtieron del riesgo de contaminación, debido a que tres camiones que cayeron al río “transportaban 22 mil litros de pesticidas y 76 toneladas de ácido sulfúrico, un producto químico corrosivo”.
Un portavoz de los bomberos indicó a la AFP, que las cisternas de esos camiones estaban “intactas” tras la caída.
Un supervisor de la Secretaría de Medio Ambiente del estado de Maranhao afirmó en una entrevista a la TV Globo que “el riesgo de contaminación e impacto al medioambiente” es “débil”, tras descartar el “peor escenario” con un vertido de ácido sulfúrico.