Desde el inicio de la pandemia de la covid-19 hace algunos años, los establecimientos comerciales de venta de ropa, alimentos, medicinas y demás, se han visto en la obligación de reinventarse para ofrecer un buen servicio y poder seguir funcionando. Bajo este entendido, el comercio electrónico ha transformado de manera radical el panorama de ventas, ocasionando que los establecimientos comerciales que operaban de manera presencial se vean obligados a cerrar algunas de sus sucursales para seguir subsistiendo.
Por Semana
Las tiendas físicas, que tradicionalmente dominaban el mercado, están viendo una caída en sus ventas a medida que los consumidores optan por la comodidad de las compras en línea. En este caso está involucrada la cadena de tiendas Family Dollar, reconocida en los Estados Unidos por ser la cadena de descuentos que abastece principalmente a clientes de bajos ingresos en las ciudades.
Debido a la mala gestión y a las condiciones difíciles en los comercios, anunció que cerrará algunas sucursales en Estados Unidos. La cadena Dollar Tree, que se centra en vender su mercancía a los compradores de ingresos medios de los suburbios, compró Family Dollar en 2015 por US$ 8.500 millones y, en los últimos años, se ha visto golpeada por el efecto del comercio electrónico en la economía norteamericana.
Hasta el momento, y según los reportes emitidos por la misma empresa, La cadena Dollar Tree, tiene previsto el cierre de 370 de sus sucursales a lo largo del 2025. Esta sorpresiva decisión se toma luego de que la misma cadena anunciara el cierre de 600 de sus tiendas en marzo de 2024.
Las razones detrás de estos cierres son diversas, incluyendo una disminución en los beneficios del programa SNAP (ayuda para la compra de alimentos en comunidades de bajos ingresos) y la creciente dificultad de mantener márgenes de ganancia elevados debido a la competencia del comercio electrónico.
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