
Marisol Saavedra, madre de Kevin José Saavedra Basallo, acudió nuevamente a la Cancillería, al Palacio de Justicia y a la Corte Suprema de Justicia en Bogotá, Colombia, en busca de respuestas sobre su hijo, pero no recibió ninguna información. El silencio de las autoridades agrava la angustia de su familia y confirma la violación sistemática de sus derechos humanos. Así lo reseñó en redes sociales el Comité por la libertad de los presos políticos (Clippve).
Kevin, ciudadano colombiano de 22 años, fue detenido arbitrariamente el 29 de octubre de 2024 en el Peaje Dos Caminos, estado Guárico, cuando se regresaba a su país luego de visitar Venezuela. Durante una requisa, funcionarios vieron su carné de servicio militar colombiano e inmediatamente lo acusaron injustamente de ser “terrorista”, sin pruebas ni debido proceso. Desde entonces, su familia no ha podido verlo ni conocer su estado de salud.
Su madre solicita que le permitan al menos una llamada para hablar con él y conocer su estado. Ya son cinco meses de angustia, durante los cuales también ha sido víctima de extorsión por parte de individuos que se han aprovechado de su desesperación ante la falta de información oficial.
Kevin es otro colombiano detenido en Venezuela sin ninguna garantía legal, víctima de un sistema que criminaliza su nacionalidad y lo mantiene privado de libertad sin derecho a la defensa ni información sobre su caso. Su detención arbitraria representa una grave violación a sus derechos humanos y evidencia el trato discriminatorio hacia ciudadanos extranjeros en el país.